Todo está absolutamente listo para que el Torneo Apertura comience con su acción, momento que cada uno de los fanáticos del fútbol estuvo esperando durante un tiempo: muy atrás quedó el descenso del «Millonario», la disputa de la Copa América, el tinte novelesco que envuelve a cada uno de los mercados de pases del medio local, los días sin encuentros y la revolución que se creó en torno a la posibilidad de modificar el formato de disputa e implementar un campeonato con 38 elencos en la «Serie A».
Por eso, Banfield, Atlético Rafaela, Unión y Argentinos serán los primeros en salir de la manga y pisar el césped para poner primera dentro de la cancha. Pese a que algunos equipos han vendido jugadores importantes y otros se reforzaron de buena manera, la principal novedad pasará por la ausencia de River entre los 20 mejores equipos del país, algo inédito, que jamás había ocurrido en el profesionalismo (se disputa desde 1931).
Como suele ocurrir en los últimos tiempos, algunos equipos toman la delantera en las encuestas como los supuestos favoritos a quedarse con la gloria; allí aparece Boca, institución que tuvo malos resultados en su gira europea pero volvió a invertir buenas sumas de dinero en incorporaciones que prometen hacer ruido: Agustín Orión, Darío Cvitanich, Franco Sosa y Rolando Schiavi, además de todavía soñar con Fernando Gago. Pese a que se retiró Martín Palermo, lo positivo será que Lucas Viatri está en el momento justo para tomar la responsabilidad y la unión grupal podría verse fortalecida. El flamante campeón, Vélez, vendió a dos de sus «joyas» como Ricardo Álvarez y Maximiliano Moralez, pero apuesta a reemplazarlos con Iván Bella, David Ramírez y una estructura de equipo consolidada desde hace años, además de seguir teniendo a Santiago Silva y Juan Manuel Martínez. Luego aparecen dos que dieron grandes saltos de calidad: por un lado Estudiantes, cerrando acuerdos con Mauro Boselli, Justo Villar, Christian Cellay, Facundo Coria y Marcos Angeleri principalmente, en tanto que recuperó a Juan Sebastián Verón y mantuvo a Gastón Fernández y Rodrigo Braña. Y luego Racing, que renovó las esperanzas con la asunción de Diego Simeone, la vuelta de Giovanni Moreno (igualmente se perderá unas fechas) y la fabulosa dupla que conformarán con su compatriota Teófilo Gutiérrez. También sumó un referente en el arco como Sebastián Saja y a un notable volante central como Agustín Pelletieri. Encima siguen Gabriel Hauche, Patricio Toranzo, Claudio Yacob e Iván Pillud, todos enormes valores.
En Primera División quedaron cuatro conjuntos denominados «grandes» y tres de ellos, a su vez, miran de reojo la tabla del descenso. «El Xeneize», San Lorenzo y «La Academia» arrancarán 12°, 13° y 14°, respectivamente, en dicho ordenamiento. Los más flojos de ellos, a priori, serán los de Boedo, quienes debieron ajustarse a una política austera y solamente movió algo sus fichas con la compra de Emmanuel Gigliotti, aunque esperan poder arreglar con Pablo Barrientos en las próximas horas. Por su parte, Independiente trajo jugadores destacados como Marco Pérez, Osmar Ferreyra y Gabriel Milito, pero su mira pareciera estar más puesta en el plano internacional.
El resto intentará ser la revelación del torneo, algo que en Argentina es más probable que en otras ligas por la inmensa paridad que abraza a los 20 clubes participantes. En ese lote podría sobresalir Banfield, que contrató a Walter Acevedo, Ezequiel Carboni y Hernán Rodrigo López como sus recientes figuras. Por el lado de los cuatro ascendidos, Unión, Belgrano, San Martín (SJ) y Atlético Rafaela, la entidad cordobesa «pinta» como la mejor armada porque mantuvo la base (César Pereyra, Franco Vázquez, Guillermo Farré, entre otros) y alimentó su jerarquía con la experiencia de Andrés Silvera, Alejandro Lembo y Esteban González.
Lanús y Godoy Cruz cuentan con menos material con respecto al certamen pasado: «El Grana» se terminó quedando con Mariano Pavone, pero perdió a su «jugador-franquicia» como lo es Diego Valeri, quien está en conflicto con la dirigencia. Por su parte, los mendocinos vendieron a Carlos Sánchez y Martín Aguirre, dos buenos elementos.
Cabe destacar, además, que todos irán por un cupo en la Copa Libertadores 2012: Vélez ya accedió por obtener el Torneo Clausura 2011, se le agregará el ganador de este certamen y los tres mejores colocados de la general (hoy serían Lanús, Godoy Cruz y Olimpo).
El fútbol argentino sentirá con creces la falta de River, el más exitoso a nivel local, como así también las de Huracán, Rosario Central, Quilmes y Gimnasia La Plata, otras de las instituciones que estarán pagando en la B Nacional sus malas administraciones. Pero de todos modos, el campeonato local otorga sorpresas, emociones y apariciones fecha tras fecha. La pasión está asegurada, ahora que comience el show.
Fuente: Infobae