Los integrantes de Calidad de Vida y del Tribunal de Faltas de la Municipalidad de La Banda, realizaron un balance sobre el operativo de control efectuado durante los festejos por el 103º Aniversario de la ciudad y por la llegada de la primavera. En la ocasión destacaron que disminuyó la cantidad de personas alcoholizadas durante las celebraciones y el número de locales sancionados.
El director de Calidad de Vida, Manuel Vallejos, y la fiscal del Tribunal de Faltas, Claudia Acuña, destacaron el trabajo desplegado por la Comuna desde el 10 de septiembre con las fiestas organizadas con motivo del aniversario de la “Cuna de poetas y cantores”, oportunidad en que se notificó a los comercios que no podían vender bebidas alcohólicas después de la medianoche.
El titular de Calidad Vida dijo: “Quienes no cumplieron con la medida procedimos a la clausura y se labraron actas de infracción pertinentes. Además, realizamos el desalojo de dos fiestas clandestinas. Desde el 18 de este mes comenzamos con el Operativo Primavera, que se concretó en diferentes boliches de la autopista, también notificando a los comercios de los alrededores, ya que no podían vender bebidas alcohólicas desde las 16 horas”.
“Con respecto a los jóvenes que querían ingresar al boliche se les realizó un control estricto donde se prohibió el ingreso de los alcoholizados. Aproximadamente doscientos chicos no pudieron acceder a los locales los días que se realizaron las estudiantinas ya que presentaban aliento etílico”, expresó Vallejos.
Del operativo formaron parte treinta inspectores, los cuales estuvieron recorriendo los diferentes locales bailables. Trabajaron conjuntamente Seguridad Vial, Proyecto Padres y Comisaria de la Mujer.
Por su parte, la fiscal agregó: “Estamos contentos con los resultados, fue un trabajo impecable, no se permitió el ingreso de ninguna persona que tuviera aliento etílico, no se observó ningún coma alcohólico. No hubo incidentes dentro ni fuera de los boliches”.
“Calidad de Vida y la Policía acompañaron a los jóvenes un trayecto a la salida de las fiestas para dar mayor seguridad. Destacamos la ayuda de los dueños de los boliches que colaboraron en todo momento”, concluyó Acuña.
El Sr. Vallejos debería también controlar los kioscos de venta de comida al paso que habilita «a piaccere», que molestan hasta altas horas de la noche, irradian música en alto volúmen, hacen retención de público, y sus baños son en cualquier parte y a la vista de la gente. Se han creado hermosos espacios de esparcimiento para niños, pero al lado existe un baño al aire libre.