Hugo Moyano recobró protagonismo al erigirse como uno de los interlocutores que tendrá Mauricio Macri con el universo sindical. El líder de la CGT Azopardo -enfrentada con el kirchenerismo desde que se rompió su sociedad- se reunió días atrás con el presidente electo y mostraron señales de buena sintonía.
Prudente, Moyano evitó por ahora frases que parezcan condicionar al nuevo gobierno. Pero consultado sobre la perspectiva de las paritarias de 2016 apuntó que sus representados no deberán perder poder adquisitivo.
«Lo que todo el mundo tiene que entender, y en particular el Gobierno, es que el movimiento obrero no está dispuesto a que el trabajador pierda poder adquisitivo del salario», dijo ante el recambio de autoridades del 10 de diciembre. Y, completó: «Si no, retrocedemos antes de avanzar y cambiamos para mal, en vez de cambiar para bien».
No obstante la advertencia, Moyano señaló en diálogo con radio Continental que «cada gremio manejará las paritarias de acuerdo a la pérdida de poder adquisitivo del salario». No habló de pisos ni sugirió un número.
En otro orden, envió una señal a la administración entrante al plantear que «el esfuerzo de evitar que se descuente el impuesto perverso al trabajo en el aguinaldo -en referencia al gravamen de Ganancias- sería un mensaje muy importante para los trabajadores» en el fin de año. Al respecto, explicó que «el trabajador prácticamente pierde su aguinaldo».
El líder camionero indicó que «uno de los temas que iría a poner en práctica» el gobierno del presidente electo «sería el descuento» de ese gravamen «en el aguinaldo» y «después modificar este impuesto al trabajo que le hace tanto daño a muchos millones de trabajadores». En efecto, días atrás el futuro ministro de Trabajo, Jorge Triaca, dejó trascender que evalúan exceptuar el pago del impuesto en el medio aguinaldo de diciembre.
Moyano consideró asimismo que «si hay un 28 por ciento de inflación», como establecen «los estudios de la CGT», la administración macrista no puede «seguir» con los índices menores que marca «la inflación del Indec». «Si no, estaríamos diciendo todo lo contrario a lo que dijimos en la campaña» presidencial de Cambiemos, agregó.
«Tenemos la suficiente responsabilidad desde el sector gremial, como desde sectores empresarios y desde el Gobierno, para poder acordar un salario que permita al trabajador mantener el poder adquisitivo», subrayó.
