Es uno de los artistas más reconocidos de la historia de la música, exmiembro de los Beatles, ha colaborado con decenas de artistas y tiene más de 20 Grammy.
Un extenso currículo que no le sirvió a Paul McCartney para que le dejaran entrar a una fiesta privada de los post Grammy, celebrados la noche del lunes en Los Ángeles.
El portal de cotilleos TMZ (quién sino) ha publicado un vídeo en el que se ve al cantante, de 73 años, esperando a las puertas de un club y marcharse sin haber obtenido el pase de entrada y ante la incredulidad de los presentes.
El cantante británico, acompañado de músico Beck y el batería de los Foo Fighters, Taylor Hawkins, tenía intención de seguir la noche de los Grammy en la fiesta del rapero Tyga organizada en el local The Argyle de Hollywood.
En el vídeo, después de una pregunta jocosa sobre su canción favorita de los Rolling Stones, se ve como el intérprete británico se queda esperando a las puertas del club.
Tras una primera negativa, exclama: “¿Qué tan famosos tenemos que ser? Necesitamos otro éxito”, les dice a sus acompañantes, un trío que ha conseguido algunos de los mayores éxitos del rock y del pop. Tras una segunda intentona, y su correspondiente negativa, se ve a sir Paul McCartney abandonar el lugar en coche.
Poco después, ya disfrutaba de la fiesta organizada por la discográfica Republic Records en otro local de la ciudad, donde alternó con cantantes como Tony Bennett, Taylor Swift o The Weeknd, modelos como Alessandra Ambrosio o Bella Hadid y actrices como Kaley Cuoco (The Big Bang Theory).
Al ser preguntado sobre el veto a su salida de la fiesta, Tyga, de 26 años, comentó que ambos son de generaciones distintas, pero que si lo hubiese visto se hubiese asegurado de que McCartney entrara en el local -aunque tampoco pareció afectarle su despiste-.
Si el año pasado se convirtió en una de las sensaciones de la ceremonia de los Grammy con su actuación junto a Rihanna y Kanye West, parece que este año McCartney recordará los premios por un motivo bien distinto. Ser uno de los compositores que más discos ha vendido no le fue suficiente como credencial. (El País)