La Dirección de Control Alimentario y Saneamiento Ambiental, dependiente de la Secretaría de Servicios Públicos, informó que continúan las inspecciones a kioscos y vendedores ambulantes que realizan sus actividades comerciales en establecimientos escolares.
El cuerpo de inspectores está encargado de controlar que los comerciantes presenten la habilitación municipal correspondiente para vender alimentos, certificado de buena salud y uniforme. Además, toda la mercadería expendida debe tener impresa la fecha de elaboración y vencimiento.
“Estas medidas están enmarcadas en los deseos expresados por el Ejecutivo Municipal y la Secretaría de Servicios Públicos de asegurar que los niños de la ciudad no corran riesgos a la hora de consumir alimentos en el recinto escolar”, indicó Alfredo Carate, director del área.
