Calefactor, calefón, duchas limpias y televisión. El gobierno de Jujuy difundió imágenes de la celda en la que está detenida hace casi cinco meses la líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala, para desmentir las fuertes denuncias que la agrupación hizo esta semana sobre el estado del penal.
Según la Tupac, denunciada por el gobernador Gerardo Morales por haber construido una estructura de poder paralela al gobierno provincial en los últimos años con ayuda del kirchnerismo, el presidente Mauricio Macri y el dirigente radical «toman revancha» contra Sala.
Consultada por LA NACIÓN, la secretaria de Derechos Humanos de Jujuy, Susana Haquim, negó todas las denuncias y afirmó que a la dirigente «se la supervisa todo el tiempo para que no se vulneren sus derechos» y que «está con atención médica constante» por un problema de salud que la aqueja desde antes de ser detenida.
«Es todo mentira», respondieron a LA NACIÓN desde la Tupac cuando se les comentó la postura del gobierno jujeño. «Estuvieron 21 días sin agua caliente y recién el martes instalaron el calefón después de las denuncias», agregaron.
«Se cambió el termotanque esta semana para que tuvieran un mejor servicio. Habrá estado sin agua dos horas», se quejó Haquim, quien destacó que Sala tiene una «cama grande, un LCD de 32 pulgadas y hasta DVD».
Mientras Sala pasa sus días privada de su libertad en la cárcel de Alto Comedero y participa de algunas actividades organizadas por el penal, en su tiempo libre lee el libro «Macri lo hizo», que guarda en su cómoda.
Alan Soria Guadalupe/La NAción
