«Venían sin hambre de gloria. No tenían pasión por vestir la camiseta nacional». Es la frase lapidaria de Iris, una fanática peruana. Lo dice frente a La Videna, el complejo deportivo de la Federación de Fútbol de su país, donde los conducidos por Ricardo Gareca forjan el sueño de lograr un triunfo esta noche (a las 23.15) ante la selección argentina.
Claudio Pizarro, Jefferson Farfán, Juan Vargas, André Carrillo y Carlos Zambrano fueron los jugadores que el técnico argentino decidió dejar de lado y apostar a una renovación que generó controversias entre los hinchas peruanos, que viven con desaliento su posición en la tabla de posiciones de laseliminatorias rumbo al Mundial de Rusia 2018. El equipo del Tigre suma 7 puntos y está penúltima en la tabla.
En un plantel con un promedio de edad de 26 años, luego de la salida de aquellos futbolistas, se mantiene firme la figura de Paolo Guerrero, el ineludible referente de los últimos años por su compromiso, su forma de ser y fundamentalmente sus goles, 27 en 75 partidos internacionales con la camiseta blanca y banda roja de su país. El delantero, de 32 años, que juega en Flamengo, es el capitán y líder natural de este plantel.
«Lo que genera Paolo Guerrero es inigualable aquí en Perú. Y su carrera, primero en Alemania y luego en Brasil, sigue cada fin de semana. Es nuestro Messi», sintetiza Yosimar, un chico de 22 años que se pasea por la puerta del bunker argentino con su camiseta número 9 de la selección peruana.
Surgido en las inferiores del Alianza Lima, Paolo tiene un curioso vínculo con Messi. Ninguno de los dos llegó a jugar un solo partido oficial en sus respectivos países… y su Barcelona fue Bayern Munich, que en una controvertida compra de un juvenil lo sumó a su equipo amateur en 2003.
Luego de nueve años en Alemania, y tras pasear sus goles por la Bundesliga primero en Bayern Munich y luego en Hamburgo, en 2012 regresó al continente americano pero para jugar en Brasil donde visitó primero la camiseta de Corinthians y desde 2005 la de Flamengo.
El Depredador o el General como se lo conoce a lo largo de su carrera, superó la leyenda de Teófilo Cubilla y con su tanto ante Haití en la Copa América Centenario se transformó en el goleador histórico de la selección con 27 conquistas.
En el dibujo táctico de Gareca esta noche, un 4-1-4-1, Guerrero será la referencia ineludible del área para tratar de lograr el tercer triunfo en Lima ante Argentina, que tiene como únicos antecedentes aquellos lejanos en 1969 y 1985.
La Nación