A diferencia de muchos otros sectores que reclaman la reapertura de paritarias, los diputados y senadores nacionales no tendrán problema para combatir la inflación. Sucede que este mes cobraron con un aumento del 47%, lo que equivale a, en promedio, 85 mil pesos de bolsillo por legislador.
Pero según reconstruyó el diario La Nación, también tuvieron aumentos en el cobro por desarraigo (lo que reciben los diputados y senadores del interior) y en los pasajes aéreos y terrestres en caso de necesitarlos.
Hacer esto fue una decisión de ambas cámaras, presididas por Gabriela Michetti en el caso del Senado y Emilio Monzó en Diputados.
«La dieta aumentó 31%, se duplicó el desarraigo y la representación y aumentó más de 100% el pago de pasajes», detalló luego en diálogo con radio Mitre.
Y opinó: «Es absolutamente obsceno si uno lo compara con el salario medio de la economía. Nosotros tenemos un proyecto para que un diputado gane cuatro salarios mínimos, que hoy sería $30 mil porque el salario está $7.560, y si quieren aumentarlo, que aumenten el salario mínimo».
Por su lado, el presidente del bloque de diputados del Frente para la Victoria, Héctor Recalde, admitió hoy que va a «analizar si corresponde» el aumento del 47 por ciento en las dietas porque esos ingresos son una «forma de financiar la política», a la vez que opinó que los legisladores que «se quejan» del incremento deben «donar el excedente al (Hospital) Garrahan».
El diputado aseguró que «todavía» no pudo constatar en su cuenta bancaria el aumento del 47 por ciento que habrían recibido los legisladores, y que «mañana lunes» se va a «informar bien».
De todas formas, cuestionó la medida, ya que «hubiera hecho otra cosa» como «asignar aumentos a los sectores más rezagados», dijo en diálogo con radio Milenium.
Infobae