El Comité de Planificación y Construcción de Jerusalén incluyó nuevamente en el orden del día tratado este miércoles, el proceso de licitación para la ampliación del asentamiento de Guilló, que el desarrollo de tres nuevos edificios situados en el sector de la ciudad ocupada por Israel en la Guerra de 1967.
La iniciativa que fue postergada hace dos meses porque coincidía con un encuentro entre el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, contrario a la política israelí de asentamientos, según informó la agencia de noticias EFE.
La portavoz de la Alcaldía de Jerusalén declaró a ese medio que «los planes en cuestión no son nuevos, el proyecto fue aprobado en noviembre de 2012» y que el proceso de ayer «se refería a los detalles técnicos para la distribución de la parcela dentro del proyecto».
La administración local «continúa trabajando de acuerdo con el plan urbanístico de la ciudad y seguirá desarrollando Jerusalén para beneficio de todos los residentes, tanto judíos como árabes», añadió en abierto desafío a los cuestionamientos de la comunidad internacional respecto de la expansión de colonias sobre territorios ocupados.
«Era previsible que lo volvieran a votar. En su momento lo retiraron para evitar una vergüenza política», consideró Bety Herschman, portavoz de la ONG israelí Shalom Ajshav (Paz Ahora) que hace un seguimiento del crecimiento de los asentamientos.
Basada en datos oficiales del Estado hebreo, esta organización contabilizó que durante los primeros seis meses de 2016 se comenzaron a construir más de 1.195 viviendas en colonias, un 40 por ciento más que en los seis meses previos.
La ampliación de las colonias judías en territorio ocupado son uno de los principales obstáculos para la paz entre palestinos e israelíes y para el establecimiento de un estado palestino independiente, según la comunidad internacional.
Sin embargo, la posición de Israel es que la expansión de colonias nada tiene que ver con el conflicto con entre palestinos e israelíes.
Durante su visita oficial a Italia, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se reunión con el presidente local, Sergio Mattarella, ante quien manifestó el principal obstáculo a la paz no son los asentamientos.
«El conflicto comenzó cincuenta años antes que los asentamientos», señaló el premier hebreo, que además consideró que el eje del problema es la negativa del presidente palestino, Mahmud Abbas, de reconocer a Israel como «Estado judío».
Fuente: Telam
