La conductora Fabiana Araujo se recupera luego de haber contraído el síndrome de Guillain-Barré, una enfermedad autoinmune que la llevó a perder la sensibilidad en las piernas. Tras haber estado internada, realizó su primera aparición televisiva en la mesa de Mirtha Legrand.
«Estoy bien, pero la pasé mal», fueron unas de sus primeras palabras en la cena. Araujo de a poco está aprendiendo a moverse nuevamente: «Ayer caminé tres cuadras, con un bastón y mi marido del otro lado, fueron tres cuadras que para mí fue como una maratón».
A pesar del dolor no baja los brazos y cree que las cosas pasan por algo: «Después de esto priorizas las cosas… ¡yo me hago problemas por el tránsito! No creo que las cosas sean injustas, hay que aprender y esta es una lección enorme, no hay que tener pendientes en la vida, mañana puede ser el Guillain-Barré o el 60 que te lleva puesto».
Además, destacó la compañía que le hizo su marido, con quien está casada hace sólo un año, en los momentos difíciles. «Soy de las personas que van siempre para adelante. Ahora lloro, pero de emoción por todas las cosas que puedo hacer. La cabeza es muy importante porque está el tema de la superación y el decir ‘hoy puedo subir un escalón, mañana voy a poder dos'».
¿Cómo comenzó todo? «Estuve con diarrea y vómitos, después con un dolor intenso de la cintura a los pies. Fui a ver a un médico, parecía un cuadro viral, con dolor muscular como de una gripe. Como los síntomas seguían volví a consultar y la doctora me pidió un laboratorio completo y cita con un neurólogo. Los análisis dieron bien, pero el siguiente síntoma fue que ya no podía caminar, así que en ese mismo momento quedé internada, me diagnosticaron Guillain-Barré y comenzamos con el tratamiento».