La salida de Carlos Balbín como Procurador del Tesoro es un nuevo retoque en la estructura en el gabinete que Mauricio Macri realiza en este 2017, aunque el funcionario era visto de reojo desde finales del año pasado cuando muchos ministros lo responsabilizaron por el costo político que representó el fallo adverso de la Corte Suprema por los incrementos en las tarifas del gas y luz, y también por su autonomía de actuación en la polémica por el Correo Argentino: había ordenado investigar el contrato de la empresa con el Estado. Pero contaba con un aval de peso: la diputada nacional Elisa Carrió, la aliada más valiosa que en estos tiempos tiene Cambiemos.
Ahora, y también con el guiño de la dirigente referente de la Coalición Cívica, Macri ya eligió al nuevo Procurador del Tesoro: se trata del abogado Bernardo Saravia Frias, que hasta hoy cumple funciones como secretario de Legal y Técnica del Ministerio de Economía y que llegó al Ejecutivo de la mano del ministro del área Nicolás Dujovne.
«Ya habló con Mauricio, y con (el jefe de Gabinete) Marcos Peña, que además se comunicó con Dujovne para decirle que lo necesitaba, y tiene el ok de Carrió, que fue la principal defensora de Balbín», confió a Infobae un funcionario que tiene despacho en Casa Rosada.
La oficialización de los cambios será en las próximas horas. Balbín, que en su momento recibió el respaldo público de Peña al elogiar su «compromiso y honestidad» pasará a ocupar la vacante que dejó el radical Leandro Despouy como embajador especial por los Derechos Humanos y oficiará como nexo entre el país y los organismos internacionales.
Saravia Frias, además de su trabajo en el ámbito privado como abogado, tiene vínculos políticos con el radicalismo. Es una persona cercana al influyente Ernesto Sanz (fue uno de los profesionales que aportaron para la campaña presidencial en 2015 del ex titular de la UCR) y también fue asesor de Fernando de la Rúa en el Senado entre 1995 y 1997.
Su estudio de abogados representó a numerosos clientes, entre los que se puede mencionar al Grupo Macri, el Bank of America, Banco Itaú, BNP Paribas, Banco Supervielle, Merrill Lynch y Banco Hipotecario.
