Habían pasado pocos minutos del final del tedeum por el 25 de Mayo y Marcos Peña apuraba el paso para salir de la Catedral, pero decidió frenar para hablar con un grupo de periodistas que esperaban ansiosos alguna reflexión sobre el duro mensaje que pronunció el arzobispo Mario Poli.
«Buena parte del pueblo no puede festejar porque carece de lo necesario para una vida digna», dijo el referente de la Iglesia. «¿Fue un llamado de atención?», le preguntaron al jefe de Gabinete, que no eludió el tema.
«Creo que es un mandato compartido, un tema que tenemos que recordar siempre, que no nos podemos olvidar de los más débiles, de los que más necesitan. Estamos comprometidos con ese mensaje, sentimos que es muy importante la voz de la Iglesia y la compartimos», concilió el referente de Cambiemos.
En ese sentido, Peña apuntó: «Me parece que lo que (Poli) plantea, aunque no soy su intérprete, tiene que ver con que cuando hay pobreza y exclusión eso nos duele como pueblo. Ese es el primer objetivo que tenemos como gobierno, pero como dijo el cardenal, tenemos que trabajar todos los argentinos».
Para resumir el acto, Peña apuntó: «Fue una homilía muy sentida y compartimos la importancia de recordar el desafío de terminar con la exclusión y la desigualdad, pero tenemos que entender que este es un trabajo que tenemos que hacer todos juntos».
«Que la inequidad genera violencia es un dato de la realidad, por eso trabajamos para reducir la pobreza y generar trabajo», remató.
Infobae
