El primer ministro francés, el conservador Édouard Philippe, ganó este martes con holgura el voto de confianza de la Asamblea Nacional, luego de prometer reducir el déficit presupuestario por debajo del 3% anual que reclama la Unión Europea, en un discurso opacado por el de ayer del presidente, Emmanuel Macron.
Además, Philippe reconoció en su mensaje que «Francia se ha mostrado incapaz de cumplir con sus obligaciones jurídicas y morales con los refugiados» y destacó que los solicitantes de asilo se ven obligados a esperar durante mucho tiempo y a veces en «condiciones vergonzosas» a que se resuelvan sus solicitudes.
El premier, quien integraba el partido conservador Los Republicanos -del que fue expulsado al aceptar su nominación al frente del Ejecutivo- prometió que su gobierno presentará nuevas medidas la próxima semana para revertir esta situación, según la agencia de noticias DPA.
En su mensaje a la Asamblea Nacional, Phillipe fue muy claro: reducirá el déficit presupuestario sin subir los impuestos, sino achicando el gasto del Estado nacional.
Entre las prioridades que adelantó Philippe se destacan la reforma laboral que el propio Macron será aprobada en los próximos meses, pese a la resistencia de los sindicatos que temen perder aún más derechos de los trabajadores; y modificaciones en las políticas de Salud y Educación.
Fuente: Telam
