La reforma del régimen previsional juega un papel central en el contexto del pacto fiscal federal que acodaron ayer el Gobierno y las provincias, con la excepción de San Luis, porque entre otras cuestiones se modificará el régimen con el que actualmente se ajustan las jubilaciones.
Una vez que la nueva ley fiscal sea aprobada en el Parlamento, las jubilaciones se van a actualizar cada tres meses y por inflación; en cambio ahora el pago a jubilados remite a una ecuación de los salarios y el incremento de la recaudación, vigente desde 2009, que dispone dos aumentos anuales automáticos, en marzo y en septiembre.
Los cambios previsionales se constituyeron en el tema que mayores esfuerzos demandó para que Nación y gobernadores alcanzaran un consenso.
El pacto establece asimismo que se van a garantizar haberes equivalentes al 82 por ciento del salario mínimo vital y móvil para quienes hayan cumplido 30 años de servicios con aportes efectivos.
El tercer punto del nuevo régimen previsional habla también de eliminar las llamadas jubilaciones de privilegio.
El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, consignó que, en el marco del consenso alcanzado entre el Ejecutivo Nacional y los gobernadores, se acordó avanzar con un proyecto para «la actualización de las jubilaciones en función de la inflación», basada en una «fórmula de cálculo» que aún debe ser «plasmada» en las iniciativas que darán forma al acuerdo «conceptual» logrado en el marco del encuentro mantenido este mediodía entre el presidente Mauricio Macri y los mandatarios provinciales.
Cadena 3