Morena tenía de seis años y murió en Rosario tras ser operada en un hospital público por haberse tragado una pila tipo botón. La familia denuncia que tardaron en atender el problema y ahora la justicia investiga una denuncia por «mala praxis».
«Si hubiesen tomado otras medidas, Morena estaría acá con nosotros”, declaró Débora, la mamá a Canal 3. La mujer contó que no sospechó que lo que su hija se había tragado era una pila pero que la trasladó al hospital de Niños Víctor J. Vilela, donde esperaron «más de 45 minutos».
«Estaba escupiendo espuma, fueron horas en que la pila me la estaba matando, se estaba quemando por dentro», relató. Una vez que la atendieron le hicieron una radiografía donde se constató la presencia de un cuerpo extraño. Entonces le dijeron «que le dé mucho líquido y de comer porque lo va a despedir».
Horas más tarde, Débora fue al Sanatorio Delta junto a la nena, donde detectaron que tenía pegado en los intestinos una pila tipo botón. Como debía ser operada de urgencia, regresó al centro asistencial público y fue intervenida ese mismo día. El 25 de noviembre la paciente fue traslada a una sala común, pero se descompensó y murió ese día.
El fiscal a cargo de la investigación, Walter Jurado, ordenó este viernes la realización de la autopsia por el episodio que comenzó el 20 de noviembre y terminó cinco días después.
Ante la presunción de que su hija podría haberse salvado si hubiese sido operada a tiempo, la mujer radicó una denuncia penal por mala praxis en contra del hospital público en la comisaría 5ta y tomó intervención el Ministerio Público Fiscal que hoy ordenó la autopsia.
Por su parte, Viviana Esquivel, directora del hospital Vilela, calificó de «muy triste y lamentable» el hecho y sostuvo que el personal actuó con «intervenciones y procedimientos de acuerdo al protocolo de ingestión de cuerpos extraños».
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