El Gobierno de Venezuela manifestó ayer su enérgico repudio a las “inaceptables” declaraciones del presidente de Francia, Emmanuel Macron, a las que consideró un acto inamistoso, a la vez que acusó a París de pretender ser una copia fiel del Gobierno “supremacista” de Estados Unidos.
La Cancillería dijo en una declaración que considera los dichos de Macron solicitando incrementar las sanciones de la Unión Europea contra el Gobierno venezolano un acto hostil del líder de una nación con la cual Venezuela ha cultivado lazos históricos y fraternales.
“La República Bolivariana de Venezuela observa con preocupación que el jefe de Estado francés, al apelar a la ofensa y a la adopción de medidas contrarias al derecho internacional, no sólo vulnera el principio de la libre determinación de los pueblos y el de la no intervención en los asuntos internos de los Estado soberanos, sino que abandona los postulados franceses de ‘Libertad, igualdad, fraternidad’”, dice.
Agrega que con su posición “pretende constituirse en una copia fiel del Gobierno supremacista de Estados Unidos, que obstinadamente, busca causar zozobra en la población venezolana y atizar la conflictividad en el país”.
Señala que resulta inaceptable para Venezuela que el presidente francés pretenda cuestionar la legitimidad, idoneidad y transparencia de los poderes públicos e instituciones consagrados en la Constitución venezolana.
“En este sentido, el Gobierno bolivariano exhorta al Gobierno francés a encauzar los vínculos bilaterales por la vía del diálogo constructivo y respetuoso, que se traduzca en relaciones mutuamente beneficiosas, y alejadas de las viejas prácticas intimidatorias que caracterizaron a la ya superada Francia colonialista”, indica. (DPA)
