Un niño de nueve años mató de un disparo a su hermana, de 13, en el estado de Mississippi, en Estados Unidos, luego de una discusión sobre el control de un videojuego, informó la agencia Afp este lunes.
De acuerdo al alguacil del condado de Monroe, Cecil Cantrell, el incidente ocurrió el sábado al promediar las 12:30 p.m. El oficial dijo a The Washington Post que fue la primera persona en llegar al lugar y vio una escena que “nunca olvidará”.
Cantrell indicó que los niños estaban en una habitación jugando videojuegos, mientras que los adultos estaban en otros ambientes de la casa. Dijo que el niño quería tomar el mando del videojuego, pero la niña no se lo quiso entregar.
Luego el menor tomó un arma que estaba colgada en un aparador y le disparó a su hermana en la parte posterior de la cabeza. La bala perforó el cerebro de la adolescente, que debió ser llevada en estado crítico a un hospital en Memphis, Tennessee, donde murió el domingo.
Se puso en marcha una investigación para determinar cómo el niño tuvo acceso a un arma de fuego y en qué medida fue consciente del peligro.
De acuerdo a un reporte de la revista Pediatrics, las heridas relacionadas a armas de fuego son la tercera causa de muerte en menores de 1 a 17 años en los Estados Unidos. En promedio, 23 menores fueron tiroteados todos los días en el 2015, según un análisis de datos que realizó el Post con data del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades.
