Macri refuerza la unidad interna al inicio de una semana decisiva

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Ajustar el discurso, cerrar filas, despejar incógnitas. El presidente Mauricio Macri y su mesa chica, a la que convoca para las decisiones importantes, se reunieron esta mañana por espacio de más de dos horas en la quinta presidencial de Olivos, con el fresco recuerdo de la semana pasada, cuando la estampida del dólar y la discusión parlamentaria por el esquema tarifario provocaron tensiones y preocupación en el oficialismo.

No hubo una comunicación oficial sobre los detalles finos de la reunión, en la que además de Macri estuvieron el jefe de Gabinete, Marcos Peña; la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal; el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y los coordinadores Mario Quintana y Gustavo Lopetegui. Si bien desde la Casa Rosada negaron que se estuviera siguiendo, la apertura de la cotización del dólar-a la baja- llevó tranquilidad en ese y los demás despachos oficiales.

«No creemos que aumente mucho esta semana, va a depender del contexto internacional», afirmaron a LA NACION en una oficina importante de Balcarce 50, mientras Macri y su mesa chica todavía estaban reunidos. Más allá del dólar, Rodríguez Larreta y sobre todo Vidal dejaron trascender su preocupación por el eventual recorte en los fondos destinados a la obra pública, anunciado por el ministro de Hacienda,Nicolás Dujovne , en sus últimas apariciones públicas. En el gobierno porteño también creen que esa decisión tendrá su impacto, pero lo sitúan en un hipotético segundo período de gestión.

Macri y su mesa chica, a la que convoca para las decisiones importantes, se reunieron esta mañana por espacio de más de dos horas en la quinta presidencial de Olivos, con el recuerdo todavía fresco del alza del dólar.

En lo que hace a la discusión por las tarifas, en el Gobierno dan por descontado que el proyecto opositor para retrotraer tarifas será aprobado el miércoles por la Cámara baja, y que el Presidente la vetará. «Todos están cómodos con eso», afirmaron desde el Gobierno. Macri y su mesa chica creen que «el Congreso va por un lado, y la gente por el otro». Y afirman: «Las boletas de servicios ya llegaron y no pasó nada».

De la quinta de Olivos, Macri llegó a mediodía a la Casa Rosada para encabezar una reunión sobre la reforma al Código Penal, junto al ministro de Justicia Germán Garavano. A las 18, luego de la reunión de la Mesa Nacional de Cambiemos que se hará a metros de su despacho, el Presidente se hará un tiempo para recibir él mismo a la cúpula de la coalición y los 5 gobernadores de Cambiemos. Alinear el discurso y evaluar futuros planes de acción también formarán parte de esas reuniones.

Jaime Rosemberg/La Nación

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