El pedido fue respaldado por el francés Francois Hollande, los italianos Massimo D’Alema, Romano Prodi y Enrico Letta, el español José Luis Rodríguez Zapatero y el belga Elio di Rupo.
Los seis repudiaron la «operación que cuestiona los principios de la democracia y el derecho de los pueblos a elegir a sus gobernantes» en un texto contra la prisión de Lula que difundió la agencia de noticias EFE.
El manifiesto, bajo el título «Llamamiento de Líderes Europeos en apoyo a Lula», fue organizado por Jean-Pierre Bel, quien fue el enviado personal de Hollande para América Latina (2015-2017) y presidente del Senado francés (2011-2014).
Los dirigentes, todos del arco socialdemócrata, señalaron en la declaración que una eventual proscripción no puede justificarse en la «lucha legítima y necesaria contra la corrupción», y recordaron que Lula es un «incansable artífice de la disminución de las desigualdades en Brasil, defensor de los pobres de su país».
El manifiesto también expresa la «preocupación seria» de los ex gobernantes por la destitución de la presidencia Dilma Rousseff, sucesora de Lula, «democráticamente elegida por su pueblo y cuya integridad jamás ha sido puesta en entredicho».
Finalmente, apela «solemnemente a que el presidente Lula pueda presentarse libremente ante el sufragio del pueblo brasileño».
Hasta ahora la posibilidad de que Lula se presente como candidato está en entredicho debido a que está condenado en segunda instancia, y su caso aún está esperando sentencia en el Supremo Tribunal, que aún no se ha pronunciado.
Fuente: diariojornada.com.ar