El curso de “Formación Básica en Mediación y Resolución de Conflictos”, destinados a profesionales del Derecho, tuvo un exitoso cierre y de esa manera se logra promover y extender el uso de esta herramienta alternativa para brindar soluciones más eficientes en conflictos sociales, evitando de esta forma la congestión del sistema judicial.
La actividad estuvo a cargo del Dr. Antonio Tula y se desarrolló en la Salón de Acuerdos y en el de Juramentos del Palacio de los Tribunales, adoptando la modalidad teórico-práctica, para permitir a los asistentes aplicar los conocimientos adquiridos durante el proceso formativo.
En este contexto, el del especialista explicó que al tratarse del curso de cierre, los asistentes tuvieron la oportunidad de presenciar, por videoconferencia, procesos de mediación reales, que iban a desarrollarse en un salón cercano.
Los casos abordados, pertenecían al fuero de Familia, así como al Civil en cuanto a daños y perjuicios, para permitir a los presentes evaluar las diferentes circunstancias que pudieran plantearse en cada caso.
“La mediación, considero yo que debe formar parte de la justicia, ya que posee un método totalmente autónomo y diferente, considerando que en la estructura judicial lo que prima, es epistemológicamente el derecho. El origen del conocimiento, lo que el juez aplica para impartir el derecho, son las ciencias jurídicas; y en la mediación, el origen del conocimiento está en la vida y en la historia de las partes, siento el proceso de arbitraje una gestión de asistencia en una negociación, sin perjuicio de que haya un marco jurídico”, expresó el Dr. Tula.
Concluido el encuentro, agregó el profesional, los alumnos deberán presentar un trabajo con modalidad de tesina, logrando plasmar en él, una articulación entre la teoría y la práctica observada, lo que servirá de requisito para aprobar o desaprobar el curso.
El profesional finalizó afirmando que, se encuentra impresionado por los grandes cambios que tuvo el Poder Judicial provincial, destacando las modificaciones edilicias implementadas, que no sólo embellecen el lugar de trabajo, sino que vuelven al recinto un lugar más apto para responder a las necesidades sociales de quienes acuden para resolver sus litigios, lo que se evidencia sobre todo en el área de mediación.
