Marcos Peña aseguró que «se va a cumplir» el pacto fiscal acordado con los gobernadores y adelantó que hay avances concretos con los mandatarios provinciales para que respalden en el Congreso el Presupuesto 2019, que contempla recortes, por el objetivo del Gobierno de reducir el déficit fiscal. «El camino fiscal se va a cumplir porque habrá un acompañamiento razonable. El compromiso que tomó la Argentina no tiene marcha atrás», dijo el jefe de Gabinete.
El funcionario hizo estas declaraciones después que el gobernador de Chaco, el peronista Domingo Peppo, pidiera postergar un año las metas fiscales acordadas con las provincias por no poder comprometerse en simultáneo a recortar gastos y ceder ingresos. En respuesta, Peña dijo que no será fácil alcanzar el equilibrio fiscal en un país que acostumbrado a gastar por encima de sus posibilidades, pero se mostró confiado en que alcanzarán esta meta.
El Gobierno negocia respaldo parlamentario con mandatarios peronistas para que los legisladores que les responden aprueben el presupuesto para el año que viene. En esta línea, Peña dijo que hay avances concretos en las negociaciones con los jefes provinciales y confirmó el compromiso de llegar el próximo año al objetivo de déficit fiscal de 1,3% del PBI.
En referencia a la delicada situación económica, marcada por la volatilidad que genera la escalada del dólar, Peña consideró que la Argentina «atraviesa un clima tormentoso producto de varios factores externos» y explicó que parte se debe al hecho de mantener «un tipo de cambio flotante».
La confianza del mundo está depositada en una sola persona, Mauricio Macri.
«Reconocemos el momento y lo tomamos con la seriedad que corresponde. Tomamos medidas, por ejemplo, el acuerdo con el FMI, que nos da el respaldo al rumbo y herramientas», dijo el funcionario en una entrevista a Radio Mitre.
Además cuestionó a sectores de la oposición que rechazan la política económica oficial. «El diálogo es lo único que se puede hacer en una sociedad democrática para ponernos de acuerdo entre personas que pensamos distinto, que ocupamos roles distintos. Es natural que existan resistencias al cambio, de quienes no creen que este sea el camino y que no quieran el cambio», afirmó.
«Hay que entender que, cuando se habla de confianza, uno de los desafíos que teníamos era salir de una economía que iba rumbo a ser Venezuela», dijo Peña. En este contexto, indicó: «La confianza del mundo está depositada en una sola persona, Mauricio Macri».
La semana pasada el Presidente agradeció el apoyo de gobernadores, legisladores y dirigentes políticos de Cambiemos y del peronismo a las metas fiscales y a las acciones que impulsa para reducir el déficit fiscal y equilibrar las cuentas públicas, tal como lo acordó con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Macri encabezó en Casa Rosada una reunión con el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, mientras que el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, hizo lo propio con los mandatarios de Neuquén, Omar Gutiérrez; Tierra del Fuego, Roxana Bertone; Mendoza, Alfredo Cornejo, y Formosa, Gildo Insfrán, para repasar temas de gestión tras el acuerdo con el FMI. Se trata de algunos de los gobernadores de la oposición considerados «dialoguistas» por el Ejecutivo.