A contrarreloj, el Gobierno apura un acuerdo con los gobernadores para cerrar el Prespuesto 2019 con déficit cero. La semana que viene el presidente Mauricio Macri recibirá a los gobernadores en Casa Rosada para asegurarse el respaldo para la llamada «Ley de leyes». En la previa, el jueves el ministro del Interior Rogelio Frigerio volverá a reunirse con las provincias, para pulir los detalles y avanzar en las negociaciones del proyecto.
El encuentro que el Presidente tendrá la semana que viene con los gobernadores servirá además para dar un fuerte mensaje político a los mercados, por la crisis económica generada por la escalada del dólar. En la reunión Macri además buscará sellar un acuerdo con los mandatarios provinciales, para reducir el déficit fiscal en $ 400 mil millones y lograr el equilibrio fiscal, como lo exigió el Fondo Monetario Internacional (FMI) como parte del nuevo acuerdo para anticipar desembolsos del préstamo de U$S 50 mil millones.
Las negociaciones por el Presupuesto 2019 entre el Gobierno y las provincias entran en su etapa final, ya que el 15 de septiembre el Ejecutivo deberá presentar en el Congreso el proyecto de ley. El martes Frigerio recibió a los ministros de Economía de 19 provincias, encuentro que se repetirá este jueves, en lo que sería la última reunión con ellos previo a que el Gobierno diseñe el proyecto que será enviado al parlamento.
Los representantes provinciales le plantearon a Frigerio y al presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados Luciano Laspina la necesidad de reducir el déficit no sólo a través del recorte de gastos, sino también por medio del aumento de la recaudación, aunque sin sumar presión impositiva. En este punto exigieron que se estudien las exenciones vigentes del Impuesto a las Ganancias, como a los funcionarios y empleados del Poder Judicial, así como la modalidad vigente de Bienes Personales y la posibilidad de establecer una «tasa más alta a los activos fuera del país».
«Esto debería ir junto con el Presupuesto. Son dos temas importantes no sólo por los recursos que pueden generar, sino también porque son los impuestos más progresivos que tiene la Argentina», dijo el ministro de Finanzas de Córdoba Osvaldo Giordano. Mientras que el jefe de Gabinete de Salta Fernando Yarade dijo que están «muy cerca» de acordar con el Gobierno, al hablar de «un mix, no sólo reducir gastos sino también ampliar el horizonte fiscal y la base tributaria».
El paquete de medidas anunciadas esta semana por el ministro de Economía Nicolás Dujovne implica varias medidas para llegar al equilibrio fiscal en el Presupuesto 2019.
Habrá menos obra pública: en lo que va del 2018 las partidas caen a un ritmo de casi 20%. El ajuste es mucho más profundo en el presupuesto para construcción de viviendas, que hasta julio se redujeron en casi 99%. También hubo recortes en las obras de transporte, agua potable y al alcantarillado. Se prevé una poda de $ 60.000 millones para esta área.
Además bajarán los subsidios: para el próximo año Economía prevé asignar $ 312.000 millones para esta área, lo que representará un aumento de tan solo 4%. En términos reales, considerando la inflación prevista para ese año, que podría ser de hasta 25%, significa entonces un recorte de partidas. Esa quita se concretará a través de un traspaso, porque tanto los subsidios al transporte como la tarifa social a la boletas de energía eléctrica recaerán en los presupuestos de las provincias.
También habrá recortes en los gastos operativos: por dos años quedarán congelados los ingresos de personal a la planta estatal, mientras que el aumento salarial de los trabajadores públicos se actualizará al ritmo de la inflación. Se rebajarán las partidas de transporte y traslado de los funcionarios, y cada ministerio deberá achicar un 30% los gastos extraordinarios.
Habrá menos transferencias a las provincias, con una reducción de hasta 74% en términos reales en los próximos años. Sería compensada con un mayor envío de coparticipación.