Entre 2003 y 2005 fue un emblema de River. Su garra y talento hicieron que, en muy poco tiempo, Javier Mascherano se ganara el corazón de todos los hinchas millonarios, quienes lo despidieron como un verdadero ídolo.
Con el paso del tiempo esta relación se fue desgastando. Al igual que ocurrió con otros grandes jugadores que vistieron la Banda, su indecisión para volver al club de Núñez generó fastidio en el público.
El quiebre final fue en 2015, luego de la final del Mundial de Clubes entre River y el Barcelona. El Jefecito ya jugaba en el Blaugrana y tuvo una reacción fría ante los saludos y cantos que recibió por parte de los hinchas argentinos. «Cualquier gesto puede ser tomado para cualquier lado y preferí aislarme», se excusó en aquel entonces.
Ahora, tres años más tarde, volvió a tomar mucha fuerza la posibilidad de que Mascherano regrese a River: si bien tiene un contrato de tres temporadas con el club chino Hebei Fortune, el jugador cuenta con la chance de romper el vínculo de manera unilateral. El excapitán de la Selección argentina se mantiene en contacto con Enzo Francescoli, manager Millonario, quien lo seduce para que termine su carrera en el mismo equipo donde la comenzó.
De llegar a un acuerdo, Masche dejaría el fútbol asiático a fin de año y en enero ya estaría a disposición de Marcelo Gallardo. Esta noticia hizo mucho ruido y dividió las opiniones de los fanáticos: muchos le hicieron la cruz, mientras que otros entienden que puede aportar un salto de calidad para el equipo.
Al menos en redes sociales, la mayoría de la gente se muestra en contra de su regreso. ¿Será esto un impedimento para que se produzca el fichaje?
