Jimena Barón es noticia con todo lo que hace. Cuando estrena una película, como sucede ahora con “El Potro, lo mejor del amor”, o con su carrera musical, hasta cuando postea un video o foto en sus redes sociales.
Es una chica que da que hablar, y en charla con DiarioShow.com se ataja: “Lamento mucho que me tengan que ver seguido, ¡pero no! ¡Fenómeno era el de Rodrigo! Es un momento de mucho trabajo, que trae mucha popularidad, digamos. Se dio un poco todo junto. Se dio la peli, el Ópera también en octubre, el ´Bailando´. La clave es disfrutarlo, a veces es difícil por todo lo que pasa, pero se consigue”.
La actriz, que interpretó a Marixa Balli en el filme que se estrenó el 4 de octubre, hizo varias escenas de amor con el protagonista, el ignoto Rodrigo Romero. Allí nació el amor: “Fue muy emocionante vivir al lado suyo el descubrimiento de su talento. Lo lindo de ser actriz es descubrir a la persona con la que te toca actuar mientras vas trabajando. Lo que más me gusta de mi trabajo es tener que generar una química rápida. Y con él, era fuego, pasión”, exclama sobre ese inicio de relación cada vez que se apagaban las cámaras.
También cuenta que ambos debutaron haciendo escenas fuertes: “Fue mi primera experiencia con escenas de sexo, era un desafío. Tuvimos que hacer ensayos con Ro, porque de no hacer nada, a pasar letra con un guión, y hacer una escena de sexo, era un montón. Había que romper el hielo. Lo hicimos un poco en el ensayo. Ro es súper respetuoso así que estaba siempre pendiente de si yo estaba bien, tranquila. Ameritaba que hagamos esas escenas porque era la historia de una pasión desmedida. No había que ponerse cuidadosos, físicamente. Tenía que ser salvaje”.
Siendo una mujer atractiva y con mucha exposición, admite que “no cualquiera se bancaría estar conmigo, por un montón de condimentos. Ya no dejo de comprobarlo. Yo me siento una piba tan normal que me cuesta entenderlo del todo. Voy a la verdulería, cocino, lo llevo al pibe al colegio. Igual sí, soy consciente de todo el circo alrededor mío, los portales, las noticias, los diarios, las cámaras. Claramente no es para cualquiera. Pero tal vez algún día alguien se la banque”.
Por las interacciones que se generan en sus redes sociales, recibe halagos todo el tiempo, pero también comentarios negativos. “El que opina sobre qué hago yo con mi vida es de palo. El día que yo me ponga a criticar el culo de una persona, o a hablar mal, te la tomo. Pero yo no critico nunca a nadie. Y si lo hago, es tomando mates con mis amigas. No me gusta hacer críticas que no suman, soy una mina constructiva, si digo algo es para que la otra persona esté mejor, o progrese. No ando tirando mier… Yo, con mi cuerpo, mi guita, mi vida, mi maternidad, y mis ex, hago lo que quiero”.
Para cerrar, explica que “no confronto con mi propio culo. Si me saco una foto medio en bolas y la subo es porque sinceramente hago lo que quiero. Siempre me sentí cómoda, con este cuerpo de hoy y con el que tenía en 2010. Siempre me fui de vacaciones y estuve en topless creyéndome mil. Es una actitud libre, me saco las fotos que quiero, lo que digan no me interesa. En Argentina es todo cuadrado a veces con el pensamiento. Pero he estado en otros lugares, y veías una mina con un short y el cachete afuera, el pelo violeta, y la gente no se metía con nadie. Acá la gente se mete por meterse. Hay mucho prejuicio, entonces yo decido vivir fuera de eso. Convivo porque me llega, pero no me va a cambiar en absoluto”.
