Por más que intente pasar inadvertida, cuando Floppy Tesouro llega, el lugar cambia su energía.
Así, la tarde apacible del parador ShowBeach –en el club Amarras– se vio convulsionada cuando la bella rubia hizo su ingreso. Pronto, un enjambre de celulares y cámaras la rodearon y descargaron cientos de clics; ella recibió cada uno con la simpatía que la caracteriza y cuando saludó al último fan se dispuso a la charla con VOS.
En la carrera de Floppy hay un antes y un después, y en eso mucho ha tenido que ver La Chica del Verano. “Soy La Chica del Verano eterna. Es que siento mucho afecto hacia el diario La Voz y hacia el premio, y recuerdo con mucho amor el momento en que gané. Sabía que era una distinción que me iba a dar un gran impulso”, se entusiasma en las primeras palabras Tesouro, aunque automáticamente aparecen las imágenes de una campaña que no resultó nada sencilla.
“Recuerdo también que cuando dijeron mi nombre salté de alegría, me emocioné mucho, pero cuando me di vuelta para saludar a las otras candidatas no quedaba ni una. Hoy me río de todo esto, pero me afectó, porque yo no soy una persona envidiosa”, dice.
En la edición 2010 Floppy se calzó rápido la camiseta de candidata y desde el primer día en el que pisó Córdoba no paró de repetir ante cada micrófono su intención de llevarse la corona de Chica del verano.
Eso sin dudas fue clave a la hora de cosechar votos, pero ¿realmente alcanza sólo con la campaña proselitista? ¿O para ganar la aceptación y el cariño de la gente hace falta otra cosa?
“En mi caso yo siempre elegí la Villa para trabajar; por ejemplo este es mi sexto año consecutivo acá, y la gente percibe el cariño que tengo por Córdoba. Obviamente no es sólo una cuestión física, yo he hecho dos tipos de campañas en los dos años que fui candidata. En el primero, fue más de mostrar en producciones de fotos, y en el segundo, que fue cuando gané, aposté a otra cosa. Además del cuerpo que uno obviamente siempre expone, lo mío fue mostrarme tal como soy, tener siempre buena onda y saber recibir el afecto que la gente te da. Fue un combo de cosas.
–Como todas las personas tendrás tus días de mejor y de peor humor ¿cómo conservás la simpatía para estar siempre dispuesta a una foto o un autógrafo?
–Llevo tan en el alma lo que hago y lo amo tanto que considero que si el público no te elige, esto dura la nada misma. Para un artista, el talento, la preparación, las ganas y el público son el combo perfecto. Más allá que hay días dispares, yo rápidamente pienso: acá está la gente que pagó una entrada, la gente que me eligió Chica del Verano, la gente que día a día me brinda el afecto. Y en definitiva la gente no tiene la culpa si yo tengo algún percance. Lo hago realmente porque lo siento. Yo no tengo un personaje, soy igual arriba y abajo del escenario.
–La fama debe tener su lado negativo ¿Qué te quitó la exposición mediática?
–Desde muy chiquita me gustaba esto; para mí es un sueño hecho realidad lo que estoy viviendo. Pero siempre uno deja cosas de lado, como pasar más tiempo con los amigos o la familia. Ahora son ellos los que se tienen que acomodar a mi tiempo libre. Tomarme días de descanso, nunca son muchos, ni en verano. Básicamente, me ha quitado tiempo.
–Tratás siempre de mantenerte lejos de los escándalos, pero, ¿hubo algún conflicto que te afectó, que se te haya hecho muy pesado?
–¡Sí! La chica del Verano (estalla en risas)… lo que me pasaba es que no entendía cómo había tanta envidia, tanta bronca. Creo que me veían muy firme desde el primer día y que tenía buena repercusión en la prensa y eso les daba bronca. Igual fue durante los primeros días; después entendí que era un juego y que si me mataban era para tener prensa. Realmente no he tenido problemas en televisión. Yo me enfoco en crecer yo sin estar mirando qué hacen los demás y cómo les va. Uno puede ser mediático sin meterse con la vida de los otros.
“Quiero ser como una Thalía argentina”
El año que comienza tendrá otro giro en la carrera de Floppy: lanzar su carrera musical. “Estoy trabajando en mi primer disco. Quiero aprovechar la popularidad y la pantalla que me dio haber estado en el Cantando 2011 y llegar a la semifinal. Fueron siete meses dentro del certamen donde la gente descubrió una faceta que no conocía de mí. Es algo que me gusta hacer y disfruto. Siento que no lo hago mal, si no no lo haría”, dice.
“Estoy preparándome mucho, porque recién estoy insertándome en el mundo de la música. No soy una cantante profesional, eso siempre aclaro. Las ganas, el esfuerzo y la dedicación no tienen que ver con creerme una profesional, pero como me dijo mi amiga Valeria Lynch: si estás cantando, sos cantante ya. Primero voy a lanzar el hit, aunque con el verano encima va todo lento. Me gusta hacer las cosas bien y hasta que no esté bien terminado no lo voy a presentar. Quiero diferenciarme de otras chicas que tal vez presentan un tema efímero y desaparecen. Lo mío es realmente una carrera que quiero seguir”, afirma.
“Me gusta la onda pop latina. Quiero ser como una Thalía argentina. Posiblemente le agregue un poco de electrónica también, pero todavía todo está en fase de preparativos. Mis canciones hablan del amor, pero no algo meloso, sino para que la gente se divierta y baile”.
Las candidatas de Floppy a Chica del Verano
1. Paula Chaves. Ha tenido un gran año. Es una chica muy fina y su perfil da como para representar al diario. Tiene una gran exposición y se mueve mucho en las redes sociales.
2. Cinthia Fernández. Tiene un lomazo increíble y los hombres la van a votar mucho. Es seria candidata.
3. Noelia Pompa. Ha ganado el Bailando con muchos votos de la gente y eso no es poco.
Qué gauchita mi mucama. Floppy Tesouro está en la obra encabezada por Florencia de la V. Teatro Melos. Alberdi 50. Carlos Paz.
Fuente: La Voz del Interior
