La Justicia de Mar del Plata sentenció este jueves al intendente del municipio bonaerense de Merlo Gustavo Menéndez a 2 años y 6 meses de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos luego de que lo hallaran culpable del delito de «fraude a la administración pública» por una serie de irregularidades ocurridas en el Casino Central y Del Mar de la ciudad balnearia entre 2006 y 2007, cuando el actual alcalde era director de las dos casas de juegos de azar.
Junto a Menéndez fue condenado por el mismo delito el otro imputado de la causa, Enrique Daniel De Luca, quien era el jefe de Administración del Casino Central de la ciudad de Mar del Plata.
Wenceslao Méndez, el abogado de Menéndez, quien fue presidente del PJ bonaerense hasta la semana pasada y el lunes realizó el traspaso del mando al jefe comunal de Esteban Echeverría, Fernando Gray, aseguró a la agencia Télam que él y su cliente estaban «realmente sorprendidos con el fallo» del juez en lo correccional 3 Luis Rodríguez.
En esa línea, Méndez anticipó: «Luego de que veamos los argumentos en los que se basó para el veredicto, apelaremos al Tribunal Superior» de la provincia.
Antes del veredicto, el fiscal Fernando Berlingeri había pedido 2 años y 6 meses de prisión para Menéndez, además de su inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos ya que consideró que está comprobado el delito de fraude. Había pedido la misma pena para De Luca.
Para el fiscal, quedó demostrado que en noviembre de 2007 Menéndez y De Luca dispusieron de $600.000 (que equivalen a más de $10 millones en diciembre de 2018) del tesoro del Casino Central «pese a que no tenían la custodia formal» de esos fondos, con lo cual «abusaron del poder jerárquico que ostentaban».
En tanto, la defensa de Menéndez había solicitado la absolución del intendente de Merlo con el argumento de que no hubo perjuicio económico para las arcas del Estado bonaerense y que, «en el hipotético caso de existir un fraude, no se podía demostrar sin dudas la autoría» de tal delito. Lo mismo argumentó César Sivo, el abogado defensor de De Luca.
En un comunicado, Menéndez calificó el fallo de «insólito, demencial y extremadamente injusto», y aseguró que la «sentencia tuvo nulo contenido jurídico y excesivo impulso politico, pero de la política miserable de prevalecer callando voces disidentes». «Vamos a apelar el fallo y a agotar las vías recursivas que me concede la ley, a la que siempre me sometí», concluyó.
El peronismo bonaerense también salió a respaldar a Menéndez, y en un comunicado se expresó «solidaridad» con el intendente y se repudió «la utilización de la justicia que hace el gobierno Nacional y Provincial, por medio de presiones y amenazas a jueces y fiscales para que procesen y condenen a los que pensamos, queremos y hacemos política para construir otra Argentina y otra Provincia».
«No es casualidad, que a meses del proceso electoral, reactiven una causa sin pruebas ni fundamento jurídico, que tiene 11 años sin avances y condenen a un compañero intendente elegido por el pueblo y del principal partido político de la oposición a nivel Provincial y Nacional.», destacó el comunicado.
El caso se remonta a 2007 cuando Menéndez era director provincial de Casinos de la zona durante el gobierno de Felipe Solá. El 8 de noviembre de 2007 una Auditoría de Lotería y Casinos de la Provincia de Buenos Aires empezó a trabajar en el Casino Central de Mar del Plata y los auditores hallaron un faltante de $600.000.
El jefe de Finanzas, Raúl Enrique Lombardo, y el jefe de Efectivo, Roberto Armando Miño, se dirigieron hasta el Casino del Mar y retiraron ese monto del Tesoro. El hecho fue registrado por las cámaras de seguridad de los casinos y fue denominado «operación mochila verde», por haberse trasladado el dinero en una mochila de ese color.