José Pedraza, ex secretario general de la Unión Ferroviaria, condenado por el crimen del militante del Partido Obrero Mariano Ferreyra, murió el sábado por la noche en la clínica Agote, confirmaron a Infobae allegados del gremialista. Tenía 75 años. Será velado este domingo.
En 2012, Pedraza había sido condenado a 15 años de cárcel como partícipe necesario del asesinato de Mariano Ferreyra, ocurrido en octubre de 2010. Luego, en 2016, el Tribunal Oral N° 21 le otorgó la prisión domiciliaria «por razones de salud».
Desde su entorno explicaron que su cuadro de salud había empeorado en el último tiempo y que estaba internado hace un mes en coma.
Pedraza nació en 1943, en Deán Funes, Córdoba. Era hijo de un empleado ferroviario y en los 60 se radicó en Buenos Aires, donde estudió Derecho. Por aquellos años comenzó a trabajar en el Ferrocarril Belgrano, donde inició su militancia gremial en el peronismo, tras un breve coqueteo con organizaciones estudiantiles de izquierda.
Su activismo lo llevó a la cárcel durante la dictadura de Onganía, cuando perdió su trabajo; sin embargo, lo recuperó en 1971, esta vez en el Ferrocarril Mitre. Desde 1985 fue secretario general de su gremio y en 1996 era secretario general de la Unión Ferroviaria. Formaba parte de «Los Gordos», como se conoce a los poderosos gremios peronistas.
Durante la última dictadura militar, participó de un paro general en 1979 y formó parte, en los 80, del Grupo de los 25 enfrentado a la ortodoxia peronista de Herminio Iglesias y Lorenzo Miguel. Bajo el liderazgo del dirigente cervecero Saúl Ubaldini, participó de los 13 paros generales con el gobierno de Raúl Alfonsín.
Tras apoyar a Antonio Cafiero en la interna peronista de 1988, rápidamente se incorporó a las filas del menemismo cuando Carlos Menem se transformó en el candidato justicialista. Así, en la década del ’90, Pedraza apoyó las privatizaciones de los ferrocarriles y se incorporó como gerente de Ferrocarriles Argentinos. Su gremio obtuvo, además, la concesión del Belgrano Cargas, que pasó a tener como presidenta a su segunda esposa, Graciela Coria.
«Yo sé lo que es limpiarme la cola con papel de diario en un excusado, y también sé lo que es dormirse sin comer, con un mate cocido en el estómago», había dicho en 2006, cuando lo procesaron por una estafa millonaria a los trabajadores de su gremio.
Crimen de Mariano Ferreyra
El 20 de octubre de 2010, el joven militante del Partido Obrero Mariano Ferreyra, de 23 años, se encontraba junto a decenas de compañeros militantes en el medio de una protesta en la que se exigía el pase a planta permanente de trabajadores tercerizados del Ferrocarril Roca.
Cerca de las 11 de la mañana de ese día se iniciaron los primeros incidentes con empleados de la Unión Ferroviaria a la altura de la estación Avellaneda. Los trabajadores arrojaron piedras y botellazos e impidieron a los manifestantes cortar las vías del tren Roca.
A las 13.40, el conflicto ya se había trasladado a la ciudad de Buenos Aires. Fue entonces cuando un grupo de empleados de la Unión Ferroviaria volvió a atacar a los manifestantes, que se encontraban en plena retirada. Así, dos integrantes de ese grupo efectuaron disparos de bala contra los protestantes y un proyectil impactó contra el pecho de Ferreyra, quien moriría a las pocas horas.
Pedraza fue encontrado culpable por ser instigador y autor intelectual de este enfrentamiento y como partícipe necesario del crimen.
Mariano Ferreyra empezó a militar en el Partido Obrero a los 13 años. Nacido en Sarandí, había llegado a ser el presidente del Centro de Estudiantes de su escuela secundaria.
Durante algunos años fue dirigente de la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA). A lo largo de su corta vida, dedicó la mayor parte de su tiempo a acciones benéficas y su participación en protestas sociales.