Lo último que escuchó Agostina Camaño fue «esta vez te voy a matar». Ese fue el momento en el que tomó la decisión desesperada de tirarse por el balcón del tercer piso del departamento en el que vivía en la ciudad de Río Cuarto, y escapar así de los golpes de su pareja. Ahora está internada y necesitará prótesis en los talones y en las vértebras para volver a caminar.
Ella tiene 19 años. Él, Marcelo Pérez, tiene 35 y era su profesor. La relación había empezado hace tres años cuando ella todavía estudiaba en el colegio secundario, pero los fue envolviendo en un espiral de violencia que la madrugada del domingo casi termina de la peor manera.
“Se trata de una situación que comenzó con violencia psicológica y fue empeorando hasta pasar a la violencia física”, contó Andrea, tía de Agostina, a El Doce. Esa noche, volvían de un casamiento cuando se desató la pelea. «Él la empieza a golpear, a decir que se encierre porque la iba a matar, ella dice que lé pegó una piña, se le llenó todo de sangre. Ella estaba huyendo de él porque le decía que la iba a matar».
Agostina necesita prótesis en los talones y en las vértebras para volver a caminar.
Así, encerrada en su habitación y con la cara cubierta de sangre, la chica intentó escapar por la ventana. «Queda colgada, trata de volver a subir porque no llegaba, pero se le fueron las fuerzas y se cayó al primer piso», relató su tía. Agostina cayó parada y fueron sus vecinos los que la asistieron hasta que llegaron los médicos.
La víctima quedó internada en terapia intermedia y necesitará de prótesis en los talones y en las vértebras para volver a caminar. En cuanto al acusado, fue detenido acusado por los delitos de lesiones graves y amenazas.
