Una adolescente de 14 años mató a su padre al incrustarle un botellazo en uno de sus brazos luego de mantener una fuerte discusión, en un hecho que conmociona a Tucumán.
De acuerdo a testigos, la joven habría salido en defensa de uno de sus hermanos, que recibía, al igual que el resto de la familia, un maltrato constante del hombre cuando estaba alcoholizado.
El golpe de la botella le provocó al sujeto tres cortes mortales. Recorrió unos 100 metros tras el impacto y fue trasladado a un hospital, pero falleció desangrado.
Su hija fue demorada por la Policía a la espera de la intervención del juez de menores.