Tras permanecer dos semanas en la ciudad de La Banda, en la jornada del sábado el padre Álvaro Iñiguez Barba regresó a México.
Como se recordará el presbítero, eclarado por el Concejo Deliberante de La Banda Ciudadano Ilustre, regresó a La Banda a mediados de octubre. La comunidad de Santiago Apóstol lo recibió con los brazos abiertos y a lo largo de estos días le demostró su profundo amor.
Durante su estadía, el padre visitó a muchas familias y compartió la Santa Misa en las distintas pequeñas comunidades pertenecientes a Santiago Apóstol.
Uno de los momentos emotivos vividos juntos al sacerdote mexicano fue el rezo del Rosario Misionero, el cual se desarrolló en la plaza Mauricio Rojas. El presbítero, junto a los padres y los niños elevaron una plegaria por cada uno de los continentes.
También compartió las Bodas de Oro de la Capilla Virgen del Valle, en donde vivieron momentos emotivos por la presencia del presbítero.
Fueron dos semanas intensas, en donde el padre Álvaro recibió el afecto de una comunidad que lo lleva muy adentro de su corazón.
Fueron 15 días de alegría y muchas bendiciones para una comunidad que se vio fortificada por el padre Álvaro, quien retornó a la tierra de la Virgen María de Los Lagos para continuar con su tarea evangelizadora. No se trata de un adíos sino de un «hasta pronto».
