Este martes, Alejandro Fantino abrió su programa de América, Fantino a la tarde, visiblemente ofuscado. ¿El motivo? Según él mismo contó, la noche anterior había estado haciendo zapping y había visto a Santiago del Moro haciéndose un test de coronavirus en vivo en Juntos Podemos Lograrlo, por Telefe.
“Primero pensé : ‘Bueno, es televisión’. Y después pensé en ese mantra al cual no adhiero que es: ‘Periodismo de periodistas no, ¿eh?’ Pero, ¿por qué no?”, comenzó preguntándose Fantino. Enseguida, el conductor empezó a dialogar con los productores que estaban detrás de cámara, quizá algo inquietos por lo que iba a decir. “Me pone muy tenso todo, si podemos bajar un poquito los decibeles…¿Está pasando algo? ¿Estamos bien? Porque es como si pasara algo…No pasa nada pero se están cayendo los satélites del cielo”, comentó antes de seguir con su relato.
Entonces, Fantino reflexionó: “¿Se podía hacer lo que hicieron ayer? Aparentemente, sí. ¿Se podía hacer cómo lo hicieron ayer? Ya es discutible. Porque, por ejemplo, hay colegas de un canal de noticias que hicieron lo mismo, pero con un tono periodístico. Un tono serio. Un tono de comunicación, de divulgación, un tono periodístico. Es más, lo hizo el mismo médico, Guillermo Capuya, Pero ayer se estaba esperando quién se iba de la casa de Gran Hermano”.
Entonces, el conductor se encargó de dejar en claro que no responsabilizaba a la producción del programa de Del Moro por lo ocurrido. Y explicó que todos pueden cometer errores, más en los tiempos que corren, en los que las normas del distanciamiento social nos han obligado a adaptarnos a una nueva forma de vida. Pero se refirió a lo que se había visto por Telefe como “un error forzado”.
“Alguien tiene que dar la cara y, como se dice en el barrio, poner los testículos sobre la mesa y decir a quién se le ocurre banalizar un test rápido de coronavirus”. Alejandro Fantino apuntó directamente al profesional de la salud. “Este es el test de Capuya. Es el síndrome médico de la Calle Corrientes. Hay tres o cuatro médicos que descubrieron la fama. Y es complicado, de grande, que te pegue la diosa fama. Y todavía no vivieron cuando abran los restaurantes, que van a comer gratis, o cuando no tengan que hacer la cola en el cine cuando todo vuelva a la normalidad. Te golpea un poquito, viste”, aseguró.
En ese sentido, el conductor de América dijo que era Capuya quien debía decirle a la producción: “Muchachos, les voy a hacer meter la pata”. Y confesó que, si bien le podía pasar a él mismo esto de cometer un error, nunca le iba a pasar “a ese nivel”, tratándose de un tema tan profundo como es la posibilidad de contagiarse coronavirus.
“Capuya: utilizaste un bien escaso. Te lo haya regalado el Enano Polvorita, Linterna Verde recién llegado a la Tierra o Juan Carlos Test Rápido, utilizaste un bien escaso. El mundo se pelea por estos tests”, dijo el conductor mirando a cámara.
Y luego hizo referencia a la difícil situación que se vive en el planeta por la pandemia. “Ahora porque estamos en casa, porque estamos encerrados. Pero ustedes no tienen idea de lo que está pasando en el mundo con estos bienes. Es dramático. Porque no somos los únicos que creemos que estamos en guerra con el coronavirus. Te afanan los respiratorios, te suben el precio de los barbijos, aumentan los camisolines…Sacás una mano afuera de la frontera y traés el muñón. Entonces, Capuya, con todo lo que estudiaste, ¿te parece banalizar un test rápido? ¿Y en alguien que no tiene síntomas?”
Fantino fue más allá y pidió que el caso llegue a la Justicia. “Creo que algún fiscal tendría que actuar de oficio. Si son rápidos para algunas cosas, también tienen que ser rápidos para esto y pedir un informe para saber qué pasó”, dijo.
Y contó que, por lo que él pudo averiguar, estos tests no se pueden comprar sino que “son del Estado”. “Ese test que vieron a Capuya hacerle a Del Moro, es un bien escaso. No voy a caer en que el día de mañana podría haberse usado para un bombero de Junin, aunque mucha gente en redes sociales se agarró de eso. Pero los médicos del Muñiz o del Posadas, que están en una guardia comiendo unos fideos y estuvieron seis horas en contacto con gente con COVID-19, porque los están cuidando, quieren saber si tiene o no el virus”, explicó.
Fantino le pidió al profesional que indique también, aunque sea mediante un tuit, si ese test estaba aprobado por el ANMAT. E insistió: «¿Quién te lo dio? Saliste al aire con Jorge Rial y dijiste que era una muestra que te habían dado. ¿Podés contarle a la sociedad quién te cedió ese test?
Y, antes de terminar, se preguntó si no valía una “disculpa pública” del profesional. Y volvió a dejar de lado la responsabilidad de la producción del ciclo e, incluso, de Del Moro, aunque señaló que éste podría haber tenido “un poco más de sensibilidad periodística” siendo una persona que trabaja en el medio hace tantos años.
Cabe señalar que minutos antes, en diálogo con Intrusos, Capuya había hecho su descargo señalando que no tenía ningún interés personal en esto, ya que los tests rápidos no estaban a la venta en la Argentina. “Son para medir anticuerpos. Ayer llegaron los primeros desde China. Son test mucho más económicos y sirven como complemento de los tests que realiza el Estado«, dijo.
Capuya recalcó que este tipo de pruegas se realizan en pacientes asintomáticos y que, por no estar realizando la cuarentena al pertenecer a una profesión considerada esencial, Del Moro entraría dentro del grupo de personas que necesitarían ser testeadas. Y concluyó: “Esta era una muestra que me habían dado a mí del test, como me dieron de barbijos y otras cosas que no comercializo jamás”.
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