Miguel Ángel Pichetto será elegido como Auditor General de la Nación. Este miércoles se realizó el primer paso formal para su nominación. Juntos por el Cambio presentó la propuesta formal en una reunión que encabezó el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa.
Del encuentro, realizado en las oficinas de la Presidencia de la Cámara, participó el propio Pichetto y los legisladores opositores Cristian Ritondo (Interbloque Juntos por el Cambio), Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica), Mario Negri (UCR) y Álvaro González (PRO).
Una vez concluido el trámite legislativo, el ex compañero de fórmula de Mauricio Macri ingresará a la AGN para ocupar la vacante que dejó el radical Jesús Rodríguez, aunque aún se desconoce qué posición adoptará el kirchnerismo, que deberá votar el nombramiento.
Fuentes parlamentarias adelantaron que es probable que el sector que lidera Máximo Kirchner se abstenga, lo que le permitiría a Pichetto ser elegido sin contratiempos.
Si bien en el entorno de la vicepresidenta recuerdan con rencor algunas críticas esbozadas por su histórico presidente de la antigua bancada del FPV en la Cámara Alta, también valoran que resistió los pedidos de la oposición para desaforar a Cristina Kirchner cuando el fallecido magistrado Claudio Bonadio pretendía encarcelarla.
La foto realizada este mediodía en la Cámara Baja dio por finalizado un fuerte debate interno en la principal alianza opositora con un triunfo de la posición del PRO, que pretendía “premiar” Pichetto con ese cargo luego de abandonar el peronismo para acompañar a Macri en el frustrado intento reeleccionista. El radicalismo, por su parte, insistía con retener ese espacio de poder. La presencia de Negri en el encuentro de hoy marca que finalmente hubo consenso entre los aliados detrás de la elección del ex senador peronista.
En sus últimas apariciones pública, Pichetto afianzó su rol opositor con fuertes críticas a la extensa cuarentena dispuesta por el presidente Alberto Fernández por el avance del Coronavirus y, esta semana, fue una de las voces que se alzó contra la expropiación de la agroexportadora Vicentin.
“La expropiación de Vicentin es una muy mala señal, además en un sector donde la actividad privada está arraigada. La intervención directa sobre un concurso todavía en marcha condiciona fuertemente la seguridad jurídica del país… y con este tipo de señales se negocia la deuda con los acreedores: se convierte en un país poco previsible. Lo que sobran en el país son alimentos; lo que tenemos que lograr es consolidar un proceso exportador muy fuerte”, planteó.