La app de delivery Glovo se va de la Argentina, según se confirmó este mediodía. La noticia llegó luego del anuncio de más restricciones al dólar y de que, esta semana, la cadena Falabella anunció que pretende dejar el país y se sumó a la lista de más de 10 multinacionales que anunciaron que ya no operarán a nivel local.
“A partir de la noticia de público conocimiento, la compañía afirma que efectivamente Glovo vendió sus operaciones de Latinoamérica a Delivery Hero, y además, dejará de operar en la Argentina. La decisión ha sido definida por la casa matriz para focalizar el crecimiento y presencia en otros mercados clave de la compañía”, detalló la empresa en un comunicado.
“Glovo Argentina comprende el impacto local del anuncio y agradece profundamente a toda su cadena de valor en el esfuerzo para consolidarse a nivel local desde su llegada al país en 2018”, explicaron.
Delivery Hero es dueño de PedidosYa y, según pudo saber Infobae, se les ofrece a los repartidores seguir en esa empresa, ahora con la mochila roja en lugar de la amarilla que identifica a Glovo. Se les envió un mensaje con un link para que puedan registrarse en forma preferencial. Glovo tiene unos 3.000 repartidores en CABA y provincia de Buenos Aires y 70 empleados propios.
La app que ahora deja el país —que conecta consumidores, comercios y repartidores— nació en Barcelona en 2015 y llegó a estar presente en 140 ciudades de 20 países distintos. En la Argentina comenzó a funcionar a principios de 2018, cuando se convirtió en una de las primeras en ofrecer servicios de delivery a través de aplicaciones móviles.
En el mercado local operaba en ocho ciudades: Capital Federal; Buenos Aires (GBA Norte, GBA Oeste, GBA Sur, La Plata, Mar del Plata y Bahía Blanca), Santa Fe (Rosario y Santa Fe); Córdoba, Mendoza, Neuquén, Salta.
“Argentina se ubica en el top 5 de países de Glovo a nivel mundial y Buenos Aires es la sede de operaciones para la región LATAM, operando también en Perú, Ecuador, Panamá, Guatemala, Costa Rica y República Dominicana”, detallaba la empresa semanas atrás. Ahora vendió toda la operación regional incluida la de la Argentina, donde la marca dejará de tener presencia.
En la Argentina, Glovo comenzó a funcionar a principios de 2018 y se convirtió en una de las primeras en ofrecer servicios de delivery a través de aplicaciones móviles
Delivery Hero adquirió el negocio latinoamericano de Glovo por USD 272 millones, luego de una ola de acuerdos en el sector de delivery de alimentos. La compañía con sede en Berlín agregará a Perú, Ecuador, Costa Rica, Honduras y Guatemala a sus mercados ya existentes, según informó este miércoles en un comunicado.
El director ejecutivo de Delivery Hero, Niklas Ostberg, señaló en julio que estaba abierto a un acuerdo con Glovo o su rival Rappi, y dijo que no dudaría en buscar buenas oportunidades. La decisión sigue a un acuerdo alcanzado el mes pasado por Delivery Hero para comprar el servicio de entrega de alimentos Instashop, ampliando su base en Medio Oriente y África del Norte, así como una participación mayoritaria en la surcoreana Woowa Brothers Corp. en diciembre.
En todo el mundo, las compañías de la industria experimentaron un aumento en los pedidos durante la pandemia, impulsadas por las medidas de aislamiento que impedían a sus clientes la salida de sus hogares.
Salida de empresas de la Argentina
La salida de la empresa Glovo del mercado local se da en un contexto de éxodo de compañías extranjeras. Este año, abandonaron el país la aerolínea chilena Latam, que tenía más de 15 años de presencia en el negocio de los vuelos de cabotaje, y las aerolíneas Qatar Airways, Emirates y Air New Zealand.
También anunciaron sus planes de dejar de operar en la Argentina las cadenas chilenas Falabella y Sodimac. En los próximos meses, cerrarán sus puertas los centros comerciales de Sodimac en Villa Tesei y Malvinas Argentinas; y dos locales de Falabella —que se había instalado en el país en 1993— en el centro porteño y en el Tortugas Open Mall.
A lista de empresas, se suman varias autopartistas, que dejaron el país o que achicaron su negocio. La empresa BASF trasladará la producción de las pinturas automotrices a Sao Bernardo do Campo, en Brasil, en el segundo semestre de 2021. Mientras que la química estadounidense Axalta cerró su fábrica y las oficinas administrativas de Escobar, donde trabajaban unas 100 personas, y la autopartista francesa Saint Gobain Sekurit mudó su producción de parabrisas a Brasil.
A mediados de julio, el laboratorio francés Pierre Fabre anunció la venta de su planta de principios activos farmacéuticos, ubicada en la provincia de Buenos Aires, al laboratorio argentino Sidus. Otros casos son Nike, que dejó su negocio local en manos de la mexicana Axo. Y Gerresheimer, una empresa de origen alemán que producía packaging para el sector farmacéutico, que vendió su operación a la local IMAP y se fue del país.