A la firma Edificio Migueletes, de la cual Márcico es parte desde 2006, se le decretó la quiebra en noviembre de 2018, una decisión tomada por el Juzgado Comercial N°25, con una intimación para que le entregue su contaduría y sus papeles al síndico responsable. Datos de la AFIP revelan años de aportes impagos a empleados de la firma, rescisiones por falta de pago de una ART.
Por ese desarrollo lo denunció una mujer que compró por 750 mil dólares, 16 departamentos y seis cocheras de un desarrollo en la calle Benito Quinquela Martín, con un “convenio de reserva y promesa de venta” firmado por la denunciante y Márcico padre en 2016. Los reclamos con intimaciones y mediaciones en el fuero civil comenzaron dos años más tarde y en 2019, Márcico hijo se presentó ante la Justicia y desconoció el acuerdo.
La Justicia detectó varias supuestas irregularidades según el procesamiento firmado por el juez Caunedo. Por ejemplo, un departamento con cochera que se le había reservado a esta mujer habría sido vendido a otra persona en 65 mil dólares. El mismo conflicto se suscitó en otro desarrollo en la calle Roosevelt, donde una pareja se presentó como querellante en el expediente y, según la acusación en su contra, Márcico padre les gravó con hipoteca un departamento antes de entregárselos.
Fuente: MinutoUno