Los vecinos del barrio Mercantil, se mostraron preocupados por el estado de abandono en que se encuentra una obra que se inició en el predio de la plaza del núcleo habitacional, y que en la actualidad es utilizado como «aguantadero» y «villa cariño». A esto se suma la inseguridad existente en la zona, situación que se agrava porque las cámaras de seguridad «adquiridas por nosotros, los vecinos, no están funcionando».
En diálogo con LA BANDA DIARIO los integrantes de la Junta Vecinal expresaron, «en la gestión anterior, mantuvimos una reunión con el Ejecutivo Municipal aquí mismo en esta plaza y desde allí surgió el proyecto de construir un salón polifuncional. Los técnicos de la Comuna hicieron los estudios correspondientes, y se comenzó la construcción; pero curiosamente quedó todo frenado».
Más adelante acotaron, «a este espacio verde, que lo mantenemos los propios vecinos, concurren no sólo niños del barrio sino también de lugares cercanos que vienen a disfrutar un día de esparcimiento. Pero tenemos un grave problema, la obra en construcción -hoy abandonada- ahora sirve a los delincuentes para guarecerse, se ocultan para consumir sustancias prohibidas. Es un peligro constante, cuando nuestros hijos vienen debemos estar atentos para que no les suceda nada».
«El peligro aumenta cuando oscurece. Ahora en invierno, el sol se oculta más temprano, entonces los malvivientes ingresan a ese lugar y están al asecho», acotaron.
A este peligro se suma que las cámaras de seguridad, «adquiridas con el aporte de cada vecino, no están funcionando. Hace unas semanas, el propietario de un local comercial sufrió un robo, las cámaras de dos particulares registraron a los ladrones, pero sus rastros se perdieron cuando ingresaron al barrio porque nuestras cámaras no funcionan».
Sobre esta cuestión ampliaron, «hace un tiempo se labró un acta acuerdo y las autoridades correspondientes la firmaron, donde se comprometían a efectuar el mantenimiento de los artefactos; ahora no tenemos ninguna respuesta sobre este tema tan preocupante».
A la vez sostuvieron, «ya conversamos con algunos funcionarios, quienes se comprometieron a darnos una respuesta, pero nunca llega. Lo que nos sorprende es que el actual intendente no nos recibe. Es imposible conversar con él. Desde el área de Economía nos informaron que el 80% de las familias que vivimos en el barrio Mercantil estamos al día con nuestras tasas municipales, es decir no tenemos deuda, y ¿así nos tratan?. No queremos ser el barrio Palermo de Buenos Aires, pero si cumplimos con nuestras obligaciones tributarias, creemos que estamos en nuestro derecho de exigir».
Finalmente los miembros de la Junta Vecinal expresaron, «exigimos una respuesta urgente. Estamos preocupados por la situación, queremos una respuesta a nuestros pedidos».
