Mientras la mayoría de los rompe corazones de la farándula -¡y del mundo!- intentan disimular su status de mujeriegos empedernidos, Matías Alé decidió cambiar las reglas del juego y hacerse cargo por completo de que es un verdadero picaflor sin cura… al menos, por el momento.
Seguramente un tanto obligado por los mensajes de texto que mostró Silvina Escudero en Bailando 2012, y que terminaron con su relación con Floppy Tesouro, el humorista habla con honestidad de su imposibilidad de comprometerse en una relación.
Así lo hizo en Sábado Show, donde protagonizó un musical en el que se refirió a las mujeres que pasaron por su vida y a su fama de galán empedernido: “Los mensajes de texto me van a matar. Todas ellas buscan casarme y hacerme sentir bien; las chicas piratas quieren controlarme y colgarse de mi fama. Quieren conquistarme, ya lo sé. Quieren que las ame, ya lo sé. Quieren que me case, ya lo sé. Quieren tener hijos en TV”, disparó al ritmo de la canción Mambo Nº 5 sobre las famosas que se adjudican haber sido sus novias.
Y contó sus “estrategias” para la conquista: “Peluches, bombones, canciones llenas de ilusiones soy un rompe corazones. Mensajes por ahí, mensajes por allá. Hablaron entre ellas y me quieren matar. Yo a la Paleo, no toqué”, aclaró en la canción.
Pero se ocupó de diferenciar a tres mujeres del resto: “Amé a Graciela, amé a Silvina, amé a Florencia y la lista no termina. Yo quiero liberarme de una vez, salir a los boliches, disfrutar. Sigan participando” Clarito, ¿no?
Después del musical, Alé les aseguró a José María Listorti y Denise Dumas: “La verdad no la he dicho aún y, como soy un caballero, no tengo memoria. Tal vez algún día la diga, no sé. Hoy no tengo ganas de volver a estar en pareja aunque siempre es bueno tener a las ex cerquita”. ¡No para!
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