El Virus del Papiloma Humano (VPH, o HPV por sus siglas en inglés) es una familia de virus que puede afectar la piel, la zona de la boca, la zona genital o anal. Los VPH llamados de “alto riesgo” pueden llegar a provocar la alteración de las células generando lesiones precancerosas, que con el tiempo pueden evolucionar y convertirse en un cáncer, como el de cuello uterino, pene, ano, boca y garganta.
Existen vacunas que protegen contra la infección por el VPH, las cuales previenen el desarrollo de enfermedades asociadas, como verrugas genitales y cánceres, si la persona queda expuesta a la infección por el patógeno. Se sabe que el 80% de la población sexualmente activa puede contraerlo.
Podrán también recibir las dosis las personas de entre 11 y 26 años que tengan estas enfermedades: lupus eritematoso sistémico, artritis idiopática juvenil, enfermedad Inflamatoria Intestinal, dermatomiositis y otras afecciones autoinmunes en plan de recibir drogas inmunosupresoras.
El esquema -se aclaró en un memorándum de la cartera de Salud- es de 3 dosis (0, 2 y 6 meses). Se considera idealmente que se debe recibir el esquema completo antes de iniciar la inmunosupresión.
Ahora, entonces, se amplió la cobertura a las personas con las enfermedades autoinmunes al tener en cuenta la evidencia científica, las recomendaciones internacionales, y la recomendación de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNaIn) de Argentina.
Qué dice la OMS sobre la vacuna VPH
Los preservativos ayudan a prevenir el VPH pero no ofrecen una protección total porque no cubren toda la piel de la zona genital, según la Organización Mundial de la Salud. Por eso, señaló que los cánceres debidos al VPH se pueden prevenir con vacunas.
Qué pasa si una persona tiene VPH
El VPH se transmite de una persona a otra mediante el contacto piel con piel en las relaciones sexuales. El virus no se contrae al usar inodoros, compartir cubiertos o en la piscina. En el 2018, hubo alrededor de 43 millones de infecciones por el VPH, muchas de ellas entre personas a finales de la adolescencia y personas con poco más de 20 años, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
La mayoría de las veces, la infección por VPH no presenta síntomas evidentes y el sistema inmunológico se encarga de controlarla de manera espontánea. En general los VPH de bajo riesgo producen verrugas en los genitales o ano. Mientras que los de alto riesgo no suelen dar síntomas.
Una persona con VPH puede transmitir la infección a otra incluso cuando no presente signos ni síntomas. De acuerdo con la Fundación Huésped, tener VPH no significa que se vaya a desarrollar una lesión. Se estima que solamente el 5% de las infecciones por este virus no desaparecen solas y se vuelven persistentes.
Sólo si la infección persiste por muchos años (se calcula de 5 a 10 años), los VPH de alto riesgo oncogénico pueden causar lesiones en el cuello del útero que pueden evolucionar al cáncer.
Dónde vacunarse contra el VPH en Argentina
La vacuna contra el VPH está disponible para los grupos priorizados en los vacunatorios públicos de todas las provincias de Argentina.
Si hay dudas, se puede consultar al teléfono gratuito 0800-222-1002, que es el número del Ministerio de Salud de la Nación. En la opción 5, asesoran sobre el Calendario Nacional de Vacunación.
Fuente Infobae