Las largas colas por la falta de combustible generaron enojo e incertidumbre

0
336

La escasez de combustible que está sufriendo el país y hace penar a automovilistas particulares, transportistas, productores del campo y empresas de todo tipo de la Argentina es el resultado de una suerte de tormenta perfecta, pero que las empresas del sector energético creen que se resuelve de manera bastante simple: aumentando los precios en los surtidores.

La secretaria de Energía, Flavia Royón, recibió este mediodía a ejecutivos de las principales operadoras de combustibles: concurrieron el presidente YPF, Pablo González; Martín Urdapilleta, de Trafigura; Marcos Bulgheroni, de PAE (dueña de Axion) y Andrés Cavallari de Raízen, que vende la marca Shell.

Hubo coincidencias en que en los últimos días la demanda de combustibles aumentó hasta el 15% respecto de 2022, influenciada por hechos como el fin de semana XXL del 13 al 16 de octubre, mayor actividad del campo y aumento del consumo el fin de semana electoral por expectativa de devaluación y aumento de precios (que efectivamente hubo).

Royón y los ejecutivos acordaron que se importarán 10 barcos de combustible y se terminarán las paradas técnicas de plantas de refinación “en los próximos días”, con lo cual, según el gobierno, los faltantes “se solucionarán en los próximos días”. El propio gobierno destacó el “récord de procesamiento” de la refinería de Raízen en Dock Sud y destacó la posibilidad de aumentar el volumen de refinación en la planta de Axion en Campana. El mensaje oficial insiste en el concepto de “abastecimiento garantizado” y busca “desalentar maniobras especulativas”.

En muchas estaciones de servicio porteñas hubo «conitos anaranjados» en el acceso a los surtidores como señal de falta de combustible (Nicolás Stulberg)
Pero las explicaciones oficiales no tranquilizan ni a estacioneros ni a consumidores, para los cuales la falta de combustible es una cuestión demasiado palpable. Las Confederaciones, Federaciones Asociaciones y Cámaras de Estaciones de Servicio alertaron sobre “el agravamiento en la provisión de combustibles, de público y notorio conocimiento” y subrayaron que lejos de solucionarse los problemas “se vienen profundizando”.

“Lo que se inició con quiebres dispersos de stock en regiones o zonas puntuales, se ha ido generalizando rápidamente con mayor intensidad a todos los productos, a lo largo y lo ancho del país, generando zozobra en nuestra actividad y complicaciones a los consumidores”, dijeron los estacioneros.

Largas colas y enojo

Los testimonios que pudo recoger Infobae esta tarde en estaciones de servicio porteña son elocuentes:

Uno de ellos expresó que estaba “muy preocupado”. El auto lo uso para trabajar y ya no sé qué hacer, intenté conseguir nafta varias veces y hasta estoy pensando en vender el auto”, destacó.

Un fletero contó en una YPF de Palermo que tenía nafta “por ahora” pero hacía cola para ver si podía cargar unos bidones “para asegurarme de tener los próximos días”. Otras dos personas señalaron que necesitaban nafta para un viaje que tenían agendado el fin de semana y estaban haciendo cola porque pensaban que sería imposible conseguir nafta durante el fin de semana.

Una mujer señaló a este medio que la consultó haciendo cola en una estación de servicio que era la cuarta en la que intentaba conseguir combustible y que ya casi gastó toda la que le quedaba recorriendo la ciudad para ver dónde podía cargar.

En una estación de Shell, un cartel indicaba que solo quedaba un tipo de nafta. Y en otra de YPF los carteles indicaban que ya no había, de ningún tipo. A los autos que entraban por la rampa, los playeros le hacían gestos de que siguieran y salieran, sin detenerse.

Infobae mantuvo el siguiente diálogo con un fletero.

– ¿Pudo cargar?

– No, desde ayer que estoy buscando buscando y no consigo. Me tiene nervioso porque tengo que salir a trabajar y si no consigo gasoil no puedo laburar. Lo primero que voy a hacer es comprar cantidad. 200 litros para tener.

Otro testimonio contó que era la tercera estación en la que intentaba cargar. “La verdad, no se puede estar así”, señaló y puso el foco en la diferencia de precios entre estaciones. “La última vez que hubo las elecciones, al otro día cerraron todas las estaciones. La única que tenía fue YPF. Ya ni importa el precio, necesito cargar como sea. Hay que cargar, hay que seguir, si no, no sé, voy a tener que vender el auto”, aseguró.

Otro automovilista señaló que tenía algo de nafta pero buscaba cargar “por las dudas, porque no sabe cuándo puede volver”. De los precios, dijo, “en este momento no me fijo”.

Un automovilista reconoció a este medio que estaba haciendo cola en una estación “ya hace como una hora y media” y que era la cuarta estación en que paraba. “En las otras directamente no hay. En mi casa no tengo, y si no cargo nafta ahora, no llego a mi casa”, explicó. Como en el caso anterior, coincidió en que ya no le importaba el precio, sino “tener nafta para poder volver; me di cuenta en la calle que no podía parar y en las que paraba había tres cuadras de cola.

Fuente: infobae

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here