El presidente electo permitirá que el país ingrese a los BRICS

0
195

“Nuestro alineamiento de geopolítica es Estados Unidos e Israel, nosotros no nos vamos a alinear con comunistas”. Esta frase es de agosto, corresponde al Javier Milei candidato que había obtenido el mayor porcentaje de votos en las PASO y hacía referencia a su rechazo por el ingreso de la Argentina a los BRICS.

Tres meses después, ya con Milei siendo presidente electo y en plena formación de su próximo gobierno, la situación parece haber cambiado. Sucede que el libertario empezó a dar indicios de moderar su discurso en lo que a política exterior se refiere, sobre todo con China, Brasil e, inclusive, los BRICS.

Según pudo saber TN de distintas fuentes de La Libertad Avanza (LLA), a esta hora la idea del equipo de internacionales, encabezado por la posible futura canciller Diana Mondino, analiza seriamente la posibilidad de mantener la inclusión a los BRICS, aunque con una participación de muy baja intensidad.

El grupo de economías en desarrollo conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica invitaron formalmente a la Argentina –junto a Irán, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Etiopía- a ingresar a partir del 1 de enero de 2024. De no mediar ningún cambio, la adhesión empezaría a hacerse efectiva en esa fecha.

Parte de la decisión que, en principio, estaría tomando el equipo de Javier Milei responde a lo que los expertos en la materia le aconsejan tanto a él como a Mondino: “La Argentina no está en condiciones de rechazar espacios de pertenencia, en cuantos más lugares podamos estar, mejor”.

Esta idea es la que se repite en gran parte de las oficinas diplomáticas y académicas que son de frecuente consulta por parte del equipo de internacionales de Milei. Ellos consideran que los BRICS representa “una oportunidad más que un riesgo” para la Argentina, tal como le aseguraron a TN distintos referentes que siguen de cerca el tema.

¿Por qué una oportunidad? Así como en el G20, los BRICS no se llevan a cabo sólo durante la cumbre de líderes que se produce una vez al año, sino que tiene un trabajo previo de coordinación entre distintos sectores de cada uno de los países miembro que permite una vinculación casi exclusiva con funcionarios y representantes de esas naciones.

“Ponete a pensar cuántos países del mundo les gustaría tener la posibilidad de, a lo largo de un año, tener unas 100 reuniones con distintos funcionarios del gobierno chino, por ejemplo. Muchos quisieran estar sentados en esa mesa y no pueden”, señala para este artículo un diplomático que inclusive está lejos de identificarse con el ala peronista de la Cancillería.

Nada está escrito sobre piedra, pero la postura que prima y más consenso interno recibe es la de ingresar y adoptar una posición moderada que le permita a la Argentina ocupar un lugar en un grupo de influencia, pero sin exponerse a fotos incómodas con “socios poco deseados” como por ejemplo Irán.

Es parte de la misma moderación que el libertario parece haber tomado con China. Esta última semana, Diana Mondino se reunió con el embajador del gigante asiático en la Argentina, Wang Wei, donde el diplomático le entregó una carta de Xi Jinping y se comprometieron a trabajar de forma conjunta, según pudo saber este medio.

Días previos a esa reunión, la vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, había considerado que la Argentina cometería un “grave error” si rompía las relaciones con Beijing, tal como había prometido Milei en campaña.

China es el segundo socio comercial y de los BRICS participa Brasil, el primer socio de la Argentina. Mantener los vínculos con ambos ayudaría no sólo a sostener el mercado de importaciones y exportaciones, sino también a impulsarlo en caso de existir la decisión política.

La nueva cancillería de Milei sabe que necesita reforzar los socios comerciales para pujar por una mayor generación de divisas e impulsar el sector productivo interno.

Fuente: infobae

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here