En la jornada del jueves, la comunidad de Nuestra Señora de Lourdes de La Banda estuvo de fiesta. Por un lado celebró la Asunción de María; el 52 Aniversario de la parroquia y además, la administración del Sacramento de la Confirmación. En la oportunidad el obispo de la Diócesis de Santiago del Estero, monseñor Vicente Bokalic invitó a los fieles a salir, «de nuestra comodidad, mirar qué pasa alrededor nuestro y dejarnos conmover».
Durante su homilía el pastor de la Iglesia santiagueña destacó, «la parroquia es la casa de todos, de los bautizados, de los hijos de Dios, de la familia de Dios, el bautismo nos ha hermanado. Por eso rezamos con confianza el Padre Nuestro. Jesús nos llevó a amarlo a Dios, que está siempre en nuestras vidas».
Seguidamente apuntó, «este es el hogar donde nos hacemos familia. En un mundo tan disgregado, con tantas peleas, discordias, divisiones. La iglesia está llamada a ser una comunión con el pueblo donde todos nos sintamos bien, hermanados; hay muchas cosas que nos unen que son más fuertes de las cosas que nos desunen».
El prelado recordó que hay dos fiestas grandes en honor a María, el 8 de Diciembre y la Asunción de María. «Tanto Jesús como María nos enseñan a dónde vamos. Caminamos hacia la vida plena; tenemos tantas lágrimas, injusticias que nos ponen mal. Caminamos hacia la tierra sin males. Males que brotan del corazón y nos hacen sufrir muchos. Allí está María en la tierra sin males».
Más adelante manifestó, «por ser madre de Jesús, discípula privilegiada de Jesús, María recibió la misión de ser la madre de todos nosotros. Celebramos a aquella que ya llegó a la meta, está en la tierra sin males donde no hay injusticia, ni pecado; ella nos acompaña en nuestro caminar».
Finalmente monseñor Bokalic recordó la acción que tuvo María ni bien se enteró que su prima Isabel estaba embazada. Fue a su casa para servir, cuidar, acompañar; en ese contexto invitó a los fieles a imitar a la Virgen, «salir de nuestra comodidad y ver qué pasa alrededor nuestro como lo hizo María».
