La comunidad católica de la parroquia Nuestra Señora de La Salette comenzó a transitar su Fiesta Patronal de una manera especial. En la jornada del sábado, en las instalaciones del templo ubicado en Avenida Aristóbulo del Valle y Domingo Juárez, se desarrolló un retiro espiritual. En la oportunidad se abordó el tema de la reconciliación. Tods las actividades se harán bajo el lema: «Con María reconciliación y misión».
Al respecto el padre Federico Poldi (administrador de la parroquia) en diálogo con LA BANDA DIARIO comentó, «la Virgen María, bajo la advocación de La Salette, llorando nos hace un pedido que nos dejemos reconciliar con Dios; de que volvamos a ser uno con el que siempre debemos ser uno, porque reconciliarnos es volver a unirnos».
«En el retiro espiritual profundizamos en que Dios creemos, en un Dios de perdón; Jesús predicó con la parábola del hijo prodigo. Dios siempre quiere que volvamos a la casa. Reconciliarnos no es sufrir por el pecado; el pecado nos hace daño y me separa de Dios. Solo con Dios puedo tener la vida en abundancia», expresó el presbítero.
Más adelante el padre Poldi expresó, «desde ahora y hasta después del 19 de septiembre, toda la parroquia vivirá en dos claves, reconciliación y misión. La Virgen nos pide que nos dejemos reconciliar, pero que también lo anunciemos a todos los hijos de Dios. En ese contexto vamos a propiciar actividades misioneras, toda la parroquia debe tener una acividad misionera; vamos a recorrer los barrios, tendremos adoración, confesión».
«De hecho mi principal tarea en este mes será administrar el Sacramento de la Confesión, que verdaderamente nos podamos reconcialiar con Dios. En este tiempo seguramente vamos a recibir la visita de muchos hermanos, pero lo primordial es que nosotros podamos disfrutar de esta fiesta. Disfurtar del amor a María, y el que quiera venir se encuentre con la reconciliación», sostuvo el párroco.
Por otra parte el sacerdote explicó que las acciones se harán bajo el lema, «Con María reconciliación y misión. Muestra Madre se procupa por nosotros, por eso llora; llora por las cosas que nos hacen mal y quiere que nos podamos unir a Dios. Él quiere reoncialiarse con nosotros, quiere estar con nosotros; y la misión, el anuncio, dar a conocer a los hermanos».
A lo largo de este tiempo cada comunidad, grupo parroquial harán misión.
«La misión es todo aquello que propicia el encuentro entre Dios y el hombre. Lo más estándar es recorrer los barrios, pero invito a la creatividad. Que nadie tenga la excusa de decir yo no puedo misionar, tenemos que generar las opciones para que todos podamos participar», finalizó.
