De más está decir que esta no fue la primera vez que la dirigente de Coalición Cívica se mostró contraria a la política del gobierno de Javier Milei ya que en otras oportunidades lo trató de «resentido», «roto» y «megalónamo».
El mes pasado, en un diálogo con Tomás Rebord, Elisa Carrió aseguró que no veía en Javier Milei «una entrega» como líder, sino «más bien veo un influencer mundial de un materialismo puro y duro con alguna mezcla del neoconservadorismo de (Donald) Reagan y (Margaret) Thatcher».
«Creo más en un acto propagandístico», convino antes de asegurar que «una sociedad rota vota a un roto, es decir que él nos expresa. Una sociedad resentida vota a un resentido».
Ya en esa entrevista se había referido a los exabruptos casi cotidianos de Milei, y advirtió que «no hay en el insulto nada que tenga que ver con Dios».
«No hay nada en Dios que tenga que ver con el no reconocimiento y empatía hacia el otro. No hay nada en Dios que no signifique amor por los que menos tienen. No hay nada en Dios que sea materialismo puro y duro. No hay nada en Dios de eso. Dios es adonái», estableció.
«Dios puede ser terrible en el momento en que construye el pueblo elegido, pero finalmente Dios es adonái, qué es adonái para los judíos, es amor. Entonces hasta ahora no lo veo», sentenció la exdiputada nacional antes de aclarar que «en donde no hay Dios es en la megalomanía».
«Por ejemplo en Milei, que es megalómano. En ‘yo soy la patria’ de Cristina (Kirchner), en ‘yo soy el mejor del mundo’. Ahí no», enfatizó Carrió.
Fuente MinutoUno
