El costo de la Canasta Básica Total (CBT) aumentó 2,6% en septiembre y llegó a los $964.620, según un estudio publicado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec). Se trata del incremento más bajo registrado desde noviembre de 2021, junto con el de junio pasado, que también fue del 2,6%.
La CBT mide el total de gastos que debe hacer una familia para cubrir el 100% de sus necesidades básicas durante un mes. Por lo tanto, los hogares con ingresos inferiores a ese valor son considerados “pobres”. De igual manera, las familias que ganan lo suficiente para cubrir el costo de una Canasta Básica Alimentaria (CBA) son consideradas “indigentes”.
En este caso, la CBA fue de $428.720, lo que marcó un incremento del 1,7% en relación al mes de agosto. En ese caso, hay un antecedente inmediato de una menor tasa de variación (1,6% en junio). Sacando ese mes, el nivel de aumento de la CBA de septiembre fue el más bajo desde agosto de 2021.
Desde el punto de vista estadístico, la canasta más determinante es la que le corresponde al grupo familiar de cuatro personas, ya que para la determinación de las líneas de pobreza e indigencia se toma en consideración el costo de vida de un hogar integrado por un varón de 35 años, una mujer de 31, un hijo de 6 y una hija de 8 años.
Sin embargo, la realidad es que cada hogar mantiene una canasta básica diferente, de acuerdo a las necesidades particulares de cada personas que lo integra. Para dar cuenta de esta situación, el Indec presenta mensualmente el ejemplo de la CBA y la CBT para otras viviendas.
Así, un hogar compuesto por una mujeres de 35 años, su hijo de 18 y su madre de 61 años, necesitó en septiembre de $341.311 para cubrir el costo de su Canasta Básica Alimentaria y $767.950 para alcanzar el valor de una Canasta Básica Total.
Para un hogar de más integrantes, los costos son lógicamente más altos. Una familia compuesta por un varón y una mujer, ambos de 35 años y tres hijos de 5, 3 y 1 año, deben gastar $450.919 al mes para cubrir sus necesidades alimenticias y $1.014.568 para cubrir el costo de una CBT.
El impacto en la pobreza
Como se mencionó, las canastas básicas se utilizan como referencia para determinar qué familias son indigentes, cuáles son pobres y cuáles son de clase media o alta. Para llegar a esa conclusión, el Indec evalúa las necesidades de cada hogar y la capacidad de ingresos de cada caso. Por eso, resulta oportuno evaluar cómo se están comportando la CBA y la CBT en relación al avance de los salarios en el país.
Aún no hay datos oficiales correspondientes al ajuste de los sueldos actualizados a septiembre, pero se pueden sacar algunas conclusiones interesantes tomando como referencia los datos más recientes, correspondientes al mes de julio.
De acuerdo con lo informado por el Indec, en los primeros siete meses del año los sueldos tuvieron un ajuste promedio del 98,1%. En ese mismo período, la CBT tuvo una suba del 81,7% y la CBA presentó un incremento del 68,6%. Eso quiere decir que los ingresos vienen subiendo a un mayor ritmo que los productos esenciales.
Ahora bien, ¿por qué entonces empeoraron las estadísticas de pobreza e indigencia en el último semestre? La respuesta está más atrás en el tiempo. Si en vez de analizar sólo lo ocurrido durante el 2024 se toman en consideración los últimos meses del 2023, la comparación cambia bastante. Según el Indec, entre julio de 2023 e igual mes de este año la Canasta Básica Total aumentó 262% y la Canasta Básica Alimentaria se incrementó 263%. En ese mismo período, los ingresos de los trabajadores tuvieron un crecimiento nominal de 206,2%.
Por lo tanto, aunque las estadísticas parciales del 2024 muestran una tendencia positiva, lo cierto es que los sueldos aún están muy lejos de recuperar todo el terreno perdido con los productos de primera necesidad.
Fuente: infobae
