El presidente electo, Alberto Fernández, participó esta noche de una entrevista en la que contó detalles de su vida personal, insistió en que buscará cerrar la grieta que divide a los argentinos y dijo que defenderá la libertad y las instituciones. «Lo peor que me podría pasar como presidente es que alguien piense que soy autoritario», dijo.
Fernández envió un mensaje a los argentinos: «Les diría que estén tranquilos. Que empieza una etapa donde todos comencemos a ganar. Se terminó el tiempo de la pelea, de esto que llamaron grieta». Y dijo que no entiende la política de otro modo que no sea a través del diálogo y la confrontación de ideas. «Yo no soy autoritario», enfatizó en una entrevista con Viviana Canosa, por Canal 9.
El presidente electo respondió de manera acotada una gran cantidad de preguntas, en una especie de ping pong. Una de ellas, estaba en relación a los dichos sobre el futuro político de Máximo Kirchner como potencial presidente de la Nación, en el marco de un «plan» de Cristina Kirchner. Sobre este tema, Fernández opinó: «Ojalá Máximo lo sea. Es un chico maravilloso, criterioso, razonable y moderado. Tiene que evolucionar más en política, pero por qué no podría llegar».
Anticipó cuál será una de las primeras reformas al llegar a Casa de Gobierno.»Quiero que vengan todos a la asunción. Lo que más me importa no es quién esté en el palco, sino quiénes estén en la Plaza. Me ocuparé apenas asuma de sacar las rejas de la Plaza de Mayo que es la plaza de todos», dijo.
Sin dar definiciones sobre su futuro gabinete, el presidente electo enumeró cuál es su círculo íntimo: «Wado de Pedro, Santiago Cafiero, Matías Kulfas y Cecilia Todesca y Vilma [Ibarra], que me ayuda con el tema jurídico». También mencionó a Máximo Kirchner, con quien dijo que habla mucho, y a Héctor Daer. Sobre Cristina Kirchner, su compañera de fórmula, contó que está en contacto diario.
Elogió una vez más a Roberto Lavagna, quien compitió en su contra en las elecciones generales de octubre. «Roberto Lavagna es de las personas más inteligentes que he conocido en mi vida. Es de las personas que uno le presenta un problema y él le trae tres soluciones. Nunca le ofrecí nada a Lavagna», dijo. Y también, a Sergio Massa. «Se preparó toda la vida para ser presidente».
Consultado sobre la crisis económica que vive la Argentina, Fernández respondió: «Sé de qué se trata, conozco los botones que hay que tocar, conozco los problemas. Sé que no puedo salir solo y estoy muy tranquilo». Y cargó contra el exministro de Hacienda Nicolás Dujovne: «Fue una tragedia para la Argentina».
«Hemos vuelvo al momento cero. Lo que más me piden en la calle es trabajo. La política se hace en los escenarios que nos tocan. Todos los argentinos la tenemos difícil, pero nos vamos a recuperar. Admiro mucho la capacidad que tenemos para levantarnos», opinó.
En cuanto a las medidas en relación a la política internacional, se refirió a las relaciones bilaterales que mantendrá el país para su administración y la forma en la que lidiará con la deuda nacional. «He hablado con todos y estoy seguro que Donald Trump, Pedro Sánchez, António Costa y Emmanuel Macron me van a ayudar a hacerle frente a la deuda. Una deuda que tiene niveles absurdos y representa el 95% de nuestro PBI», dijo.
Fernández dio detalles de la conversación que mantuvo con Mauricio Macri sobre la crisis que atraviesa Bolivia. «Lo llamé preocupado y le dije que la vida de Evo corría peligro y que había que hacer algo», dijo. Y continuó: «Me dijo que era complejo por la transición, pero yo no lo comparto, no estoy de acuerdo».
Por último, Fernández confirmó que se mudará a la Quinta de Olivos luego de asumir la presidencia. «Dylan va a tener su propia plaza en Olivos», bromeó. Sin embargo, resaltó que no quiere perder la cercanía con la gente. «Me cuesta irme porque Olivos es un lugar lindo pero que aleja mucho, uno no se entera de lo que está pasando en la calle. Yo quiero seguir pudiendo sentarme en un restaurante a comer y que la gente se acerque a hablarme. Escuchar, escucho a todos. Es importante el ejercicio de poder respetarnos», expresó.
La Nación