«El problema está muy lejos de terminarse», dejó claro el mandatario, que pidió que «salgan a la calle aquellos que están habilitados para hacerlo» y que se mantengan adentro de sus casas el resto, «fundamentalmente los adultos mayores», teniendo en cuenta que «el 85% de los afectados son mayores de 65 años».
«Yo me siento muy acompañado, siento que la sociedad nos está acompañado claramente. Ha entendido que estamos viviendo una situación de emergencia y una situación dramática. A partir de eso todos necesitamos unir esfuerzos», indicó Fernández al evaluar «muy alto» grado de acatamiento del aislamiento social, preventivo y obligatorio dispuesto por un decreto de necesidad y urgencia (DNU) del 20 de marzo.
Agregó que también se siente «muy acompañado» por «la dirigencia política», aún sabiendo que llegará el momento en que no van a estar de acuerdo «porque así es la democracia».
También destacó el hecho de que «frente a una crisis de esta magnitud» todos estén «tirando para el mismo lado», aunque dejó claro que esto no debería verse como «una excepcionalidad», sino como algo natural.