Además, se hicieron presentes la vicepresidenta de la Corte Suprema, Elena Highton; la ministra de Justicia, Marcela Losardo; el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; y el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, entre otros.
“Lo que estamos proponiendo no es otra cosa que consolidar una Justicia independiente, regida por las mayores normas de transparencia y que desarrolle los procesos con celeridad y eficiencia. Estoy convencido que todos los argentinos y argentinas participan de estos propósitos”.
Según indicó el Presidente, el proyecto crea la Justicia Federal Penal con asiento en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, “mediante la consolidación de los fueros Criminal y Correccional Federal y Penal Económico”.
“Cada uno de esos Tribunales actuarán en lo sucesivo con una de las dos secretarías que actualmente tienen. La restante se convertirá en secretaría de 23 nuevos tribunales que se sumarán para acabar de conformar el fuero”, explicó.
Según supo NA, el proyecto no ingresará por Diputados debido a que las autoridades de los distintos bloques que componen Juntos por el Cambio le advirtieron al presidente de la Cámara, Sergio Massa, que no lo debatirían de manera remota.
Por ese motivo, se decidió que la Reforma Judicial ingresará «en las próximas horas» por el Senado donde el oficialismo tiene, sumando a los aliados de distintas provincias, un margen favorable para aprobar el proyecto.
Debido a la composición y al peso ponderado que ostenta el oficialismo en ambas cámaras, en Diputados es donde estará la gran batalla por aprobar la reforma que interesa tanto a Alberto Fernández, ya que fue una de sus principales promesas ante la Asamblea Legislativa, como a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
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