El jefe de gobierno alemán, Olaf Scholz, reafirmó este viernes que su país no suministrará armamento de largo alcance a Ucrania, mientras que Estados Unidos y el Reino Unido debaten la posibilidad de autorizar su uso a Kiev en el conflicto contra Rusia.
El líder alemán reiteró que, pese a ser el principal aportador europeo de asistencia financiera y militar a Ucrania, su país no suministrará a Kiev los misiles de largo alcance Taurus, producidos en Alemania.
Políticos alemanes, incluidos miembros de la coalición de gobierno de Olaf Scholz, han instado al canciller a que tome la decisión de enviar los misiles. El primer ministro británico, Keir Starmer, y el presidente estadounidense, Joe Biden, se reunieron el viernes en Washington para discutir el asunto.
El portavoz de Scholz, Steffen Hebestreit, afirmó que “las armas sobre las que Estados Unidos y Reino Unido están discutiendo actualmente son armas que nosotros no suministramos (…) y, en este sentido, no hay ningún cambio”.
Desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania, Scholz ha mantenido una postura alineada con las decisiones de Estados Unidos en relación con el envío de armas a Kiev. No obstante, el líder del gobierno alemán debe equilibrar su compromiso de apoyar a Ucrania “el tiempo que haga falta” con los temores de una parte de la opinión pública, preocupada por una posible escalada del conflicto con Moscú.
El jueves, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, advirtió que la OTAN, EEUU y los países europeos entrarán en guerra con Rusia si autorizan el uso de misiles de largo alcance a Ucrania.
El Partido Socialdemócrata de Scholz, que gobierna en coalición con los verdes y los liberales, sufrió una contundente derrota en dos recientes elecciones regionales frente a la extrema derecha, que se opone al apoyo militar a Ucrania.
(Con información de AFP)
Fuente Infobae