Todos los perros van al cielo, pero una empresa de Corea del Sur llamadaSooam lleva diez años especializada en la clonación de las mascotas caninas para que los dueños puedan mantenerlos a su lado para toda la vida.
En su sitio oficial, el equipo de Sooam explica que para clonar a un perro es necesario extraer una muestra de tejido dentro de los 5 días después de la muerte del animal. Lo más recomendable es guardar el cuerpo en la heladera, envuelto en toallas húmedas.
También se pueden extraer una muestra de tejido de un perro vivo. Luego es cuestión de continuar el proceso de reemplazo del núcleo de una célula por el del material genético del donante y 60 días después el dueño vuelve a tener a su amado perro.
Fuente: MinutoUno