El Frente de Todos aceptó incorporar este jueves algunos de los pedidos de la oposición, así sumó a la ampliación presupuestaria $9.500 millones adicionales para que las provincias puedan hacerce cargo de los subdidios al trasporte público. Este reclamo había sido realizado ayer por el titular de la comisión de Transporte, el radical José Cano. Sin embargo, para Juntos por el Cambio, el monto resultó insuficiente.
Un punto que no logró ser saldado fue la reposición de una alícuota del 10,5% al consumo de leche común en concepto de IVA, que va de la mano de una rebaja del 21% al 10,5% en las leches aditivadas y fortificadas, uno de los más criticados por la oposición. Tampoco se llegó a un acuerdo respecto a la dolarización de la deuda en pesos.
«El mensaje del Poder Ejecutivo nos plantea la perentoriedad del tratamiento de esta cuestión. No tenemos margen. Si no lo aprobamos con celeridad, habrán dificultades operativas en agosto para poder cumplir con el IFE, con el ATP y con cuestiones esenciales que hacen al sostenimiento de la estabilidad social de la Argentina», señaló Heller.
En la iniciativa que giró a la Cámara baja, el Gobierno busca ampliar partidas del Presupuesto 2020 en un 33,6%, con un incremento del gasto de 1.859.583 millones de pesos, que se sumarán a los $5,5 billones ya aprobados.
El 80% de ese gasto adicional se explica por las prestaciones de la seguridad social, subsidios económicos a la energía y el transporte para sostener el congelamiento tarifario, y los programas IFE y ATP.
La diputada kirchnerista Fernando Vallejos destacó que «esta expansión del gasto es una clara manifestación de voluntad política» para dar respuesta al estado crítico de la economía producto del aislamiento social obligatorio que impone la pandemia de coronavirus.
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