La Justicia inició una causa para determinar si el narcotraficante Henry de Jesús López Londoño planeaba escapar de la cárcel de Ezeiza. En las últimas horas, un trabajo de inteligencia del Servicio Penitenciario Federal (SPF) halló una serie de elementos que abonaron esa hipótesis, por lo que se hizo una denuncia.
Mientras se avanza en la investigación, Emiliano Blanco, director del Servicio Penitenciario Federal, decidió el pase a disponibilidad de Héctor Retamozo.
En una requisa ordenada por el juez federal de Lomas de Zamora, Federico Villena, sobre la celda de «Mi Sangre» se hallaron de dos chips de teléfono y un Iphone, que fue remitido a peritos de la Policía Metropolitana para que analicen llamadas entrantes y salientes, así como todo tipo de mensajes de texto y whatsapp.
También un modem wifi y una notebook que se le había permitido ingresar en 2013 por orden de la Sala I de la Cámara Federal de Casación, luego de que apelara la negativa del juez federal Sebastián Ramos. Y unos 100 CD’s que tenían imágenes del exterior de la cárcel y zonas aledañas.
Además, María Gabriela Ricagno, defensora del condenado, se le secuestró un mapa aéreo de la zona de Ezeiza donde aparecerían marcadas todas las comisarías de la zona y las correspondientes DDI.
Fuentes en el SPF indicaron a Infobae que el personal penitenciario del CP1 activó los protocolos al hallar el mapa de la abogada de «Mi Sangre», lo que llevó a revisar su celda para hallar un celular oculto.
«El teléfono debería haberse encontrado antes. Hubo cuestiones de requisa y de control que se le pidieron expresamente a Retamozo tiempo atrás y que no se cumplieron», apunta una alta fuente en el Gobierno.
Por lo pronto, el actual subdirector del penal llenará su puesto: no hay un reemplazo todavía en mente.
En las cabezas del SPF, la posibilidad de que «Mi Sangre» intente fugarse comenzó a sonar a la par de las decisiones de la Justicia Federal, con la decisión de permitir que Londoño sea extraditado a los Estados Unidos. En cuanto a cómo obtuvo el teléfono, existen dos hipótesis: el ex capo narco lo obtuvo en el CUD, el Centro Universitario del penal de Devoto donde cursa estudios, o lo ingresó su abogada misma. Dado que el teléfono es de alta gama, las autoridades del SPF se inclinan a pensar en lo segundo.
La división de Asuntos Internos del SPF decidió que ahora «Mi Sangre» sea trasladado fuera del pabellón en el que estaba. Estará bajo registro fílmico las 24 horas. Además se reforzó la vigilancia con más efectivos, mientras que al exterior del penal se le sumó seguridad con personal de la Policía Aeroportuaria.
La hipótesis de la fuga que trascendió desde el SPF es llamativa: un posible ataque al complejo penitenciario de máxima seguridad encabezado por un comando integrado por ciudadanos chilenos y peruanos contratados por Los Urabeños, el clan narco paramilitar al cual respondería López Londoño.
El 30 de octubre de 2012, «Mi Sangre» fue detenido mientras cenaba en un restaurante de Pilar por policías de la Federal y fue señalado por el ex secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, como uno de los narcos más buscados del mundo. López Londoño había ingresa a la Argentina a fines de 2011 con su mujer y su hijo, se desplazaba «con custodia» y vivía «saltando de country en country o barrios de chacras para no ser detectado», según informó Berni cuando lo detuvieron.
En mayo de este año, la justicia argentina ordenó la extradición del colombiano a los Estados Unidos, donde se lo requiere por el delito de narcotráfico. La medida fue apelada y está pendiente de resolución de la Corte Suprema.
